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Cine chileno: «De Jueves a Domingo» se estrena en Chile tras triunfo en el extranjero

“La ficción toma su propio camino”, sostuvo la directora del filme, Dominga Sotomayor.


Tras haber triunfado en el Festival de Rotterdam y haber circulado por numerosos certámenes internacionales, recibiendo un sinnúmero de elogios, el film “De Jueves a Domingo” será estrenado en nuestro país a través de la nueva sección de distribución de la agencia CinemaChile. La película, ópera prima de la joven cineasta Dominga Sotomayor, narra el viaje de fin de semana de una familia que se desintegra, visto a través del punto de vista de la hija mayor.

“Estrenar en Chile es el final de un proceso”, señala su directora, “Ha sido un recorrido muy largo, pero siempre el principal objetivo han sido las salas chilenas. Estoy súper intrigada con lo que al público chileno le pueda pasar, cómo reaccionará la gente que conozco. Por un lado, De Jueves a Domingo es una película con temas muy universales, por eso ha generado tantas reacciones en el extranjero, pero creo que puede haber una conexión distinta acá, estoy muy expectante”, señala Dominga respecto al estreno de su película en cines nacionales.

Sin embargo la cinta ya pudo verse durante octubre del 2012 de forma exclusiva en el marco del Festival de Cine de Valdivia, donde obtuvo la principal distinción. “Fue muy emocionante el premio de Valdivia porque es el primer festival al que fui con un corto siendo estudiante… es como que forma parte de mi recorrido”, señala Dominga, “En esa oportunidad los actores vieron por primera vez la película, y también mi familia pudo verla, todos viajaron a Valdivia y fue muy lindo. Ellos entendieron De Domingo a Jueves 2muy bien que la historia tiene mucha relación con mi propia historia personal, a pesar de toda la ficción”. El personaje de Lucía, interpretado por la preadolescente Santi Ahumada, guarda mucho parecido con Dominga y gran parte del imaginario del film está inspirado en los viajes familiares que la directora realizaba con sus papás en los noventa. “Para mi papá fue emocionante verse retratado”, dice Dominga a este respecto, “sin embargo la realidad es sólo el punto de inicio, la ficción luego toma su propio camino”.

La obra de Dominga está atravesada por la imagen de una familia fracturada, tanto en sus cortometrajes “Noviembre” y “Debajo”, como en su primer largometraje. “Me gusta poner en juego el tema de lo familiar, amenazándolo con cierta incomodidad a través de la puesta en escena, a pesar de la naturalidad y cotidianeidad que pueda haber en la superficie”, explica Dominga, “no creo en la estructura tradicional de la familia ni en los roles establecidos”. En el caso de De Jueves a Domingo, este quiebre inminente pero silencioso está narrado desde la perspectiva de los niños, “no quería salir del asiento de atrás, generé un sistema dentro del auto donde los personajes pudieran desarrollarse, no sin algo de incomodidad”, agrega.De Domingo a Jueves 3

Respecto a la cuidada fotografía del film, Dominga nos cuenta que “en el rodaje estábamos súper comunicadas con Bárbara Álvarez, teníamos la película completa en la cabeza y por lo mismo fue increíble trabajar con ella. Los encuadres ya estaban muy claros incluso desde el guión. Yo escribo describiendo detalladamente qué vemos y desde dónde, por eso creo que mi principal labor como directora está en la escritura”. Sin embargo los encuadres no son caprichosos, son estrictamente compuestos en función de la perspectiva de ambos niños, “Fue muy útil haber grabado cronológicamente porque los niños comenzaron algo más nerviosos y después se fueron acostumbrando a la cámara y a su presencia”, explica Dominga, “igual ellos nunca supieron la película completa, no les conté de qué iba el guión y sólo trabajábamos el día a día, creo que eso ayudó mucho en la atmósfera borrosa del conflicto de los padres”.

Los adultos, interpretados por Fracisco Pérez-Bannen y Paola Giannini, fueron de gran ayuda para armar las escenas con los niños. “Yo les daba el tono, pensábamos en cambios físicos que ocurrieran en ellos, evoluciones en el estado de ánimo”, explica la directora, “sobretodo porque el conflicto está por fuera de los diálogos, es más bien subterráneo”. Rodado en 16mm, “De Jueves a Domingo” exigió mucho ensayo y precisión con los actores. “Hacíamos a los niños llegar a los diálogos en vez de Dominga Sotomayordárselos. Yo quise hacer algo súper naturalista, pero no llegar desde la improvisación sino desde lo escrito, ese era el desafío”, agrega, “además para los actores que son de la televisión fue interesante no tener 3 cámaras sino una, actuando en función del encuadre. Además para lograr ese realismo, quise que siempre estuvieran los cuatro en escena, aunque sólo se vieran los niños. Así fue como se dio algo familiar entre ellos, a veces yo estaba en otro auto y Pancho y Poli guiaban y cuidaban a los niños. Armábamos dinámicas, a veces uno de los niños no sabía la escena y los actores me ayudaron mucho en eso”.

En este método de dirección, los niños dentro de la película nunca supieron durante el rodaje cuál era el conflicto que acechaba a los padres. “Todos tenían guión, menos Santi”, nos cuenta Dominga, “y como niña tenía una curiosidad natural, intentaba robarse guiones o leer otras escenas. Fue como un juego que para mi fue muy fructífero. Se fue enterando de a poco qué era lo que pasaba, y cuando se dio cuenta que los padres se separaban también fue fuerte para ella, justo ocurre en pleno desierto, en el clímax de la película y le pasó lo mismo que al personaje, entendió el tono de nostalgia. Al mismo tiempo, ella también estaba cansada después del rodaje y ese cansancio también aporta a su estado emocional en esa secuencia.

Tratándose de una road movie, el film transcurre en gran parte sobre el station wagon familiar, por lo que las posibilidades de encuadre eran más bien limitadas. “Intentamos que a pesar de la rigidez de los encuadres, dentro del auto ocurrieran distintas cosas hasta el punto que la composición fuera muy dinámica”. Ya al final del film, cuando la familia llega al desierto, hay un encuadre muy elocuente respecto a la historia: vemos a Lucia de espaldas mientras que sus dos padres están distanciados como en un duelo, frente a ella. “Para mi toda esa secuencia se trata de irnos hacia su interior, me interesaba acercarme al tiempo de ella, aproximarnos a esa sensación de abandono que pueden haber sido 5 o 10 minutos, pero para un niño en el desierto puede ser eterno. Es como una imagen traumática, una experiencia que es origen de todos los traumas, constituyente de Lucía para siempre: y coincide con la separación de los papás”, reflexiona Dominga, “también es la primera vez que lo ve todo de frente, por eso ese encuadre es tan explícito. Allí el tiempo se dilata y se transforma en una película casi de terror, me interesaba salirme del realismo y naturalismo de antes y adentrarnos en la subjetividad del De Domingo a Jueves 4personaje de Lucía. Es una desintegración muy interna, la madre fuera de campo, sin saber dónde está, y nos quedamos con la niña sola. Para mi allí se descubre el protagonismo de Lucía. Yo creo que la película es en definitiva una mirada de la niña sobre su mamá. Por eso quizás es más femenina, es el conflicto de Lucía con su madre, de que quizás ella no quiere ser así. La madre (Giannini) es súper densa, y quizás Lucía quiere salir de ese esquema, eso se ve cuando llevan a las mochileras, se siente esas ansias de libertad mientras que la madre está sujeta a su esposo, sin saber dónde la va a llevar este hombre. Igual su personaje tiene un momento de lucidez, cuando se da cuenta que no quiere estar con un tipo que no la ama, pero aún así para Lucía la madre es algo que ella no quiere repetir cuando grande”.

“De Jueves a Domingo” ha tenido un éxito rotundo en distintas latitudes del globo, y podrá ser visto en las salas de cine de Chile desde el 4 de Abril. Así mismo se estrenará en Argentina, Inglaterra, Polonia, México y otros países en el mes de Mayo.

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