El galardón fue concedido por la cadena franco-alemana «Arte»
En un comunicado oficial del festival se informó que la realizadora de los «El verano de los peces voladores» recibió 6.000 euros por su proyecto «Los perros» en la categoría Premio Internacional que reconoce «proyectos excepcionalmente creativos. Mientras las películas de Pablo Larraín y Patricio Guzmán siguen cosechando éxitos de la crítica internacional a punto de calificar el cine nacional de «superpotencia» en la Berlinale.
La directora Marcela Said fue galardonada ayer con el premio internacional que concede la cadena franco-alemana Arte en el mercado de coproducciones de la Berlinale por su proyecto Los perros, según informó el festival de cine en un comunicado.
El galardón está dotado con 6.000 euros (6.800 dólares) y reconoce «proyectos excepcionalmente creativos», según destacaron los organizadores.
Es el primer premio que recibe en este certamen uno de los realizadores de la delegación chilena, que participa con dos películas en sección oficial (El botón de Nácar, de Patricio Guzmán, y El Club, de Pablo Larraín) y otras ocho películas en diferente categorías.
Los perros, es el segundo largometraje de ficción de esta directora tras El verano de los peces voladores, estrenado en la Quincena de Realizadores de Cannes, y después de tres largometrajes documentales.
Por su parte, el proyecto «Bienuidado», presentado en Berlín por la productora argentina Gema Juarez Allen y el director panameño Abner Benaim recibió el premio VFF, dotado con 10.000 euros (11.300 dólares) y que distingue trabajos considerados «prometedores».
En el mismo mercado de coproducciones de la Berlinale, el premio Euroimages, dotado con 20.000 euros (22.600 dólares) de este fondo europeo creado para promover la industria cinematográfica, recayó en el proyecto «3 Days in Quiberon», dirigido por Emily Atef y presentado por la compañía alemana Rohfilm.
La Berlinale seleccionó 36 proyectos para su mercado de coproducciones, un foro en el que pone en contacto a los cineastas con posibles productores y socios financieros.
Por otra parte los directores Pablo Larraín y Patricio Guzmán, siguen cosechando elogios de la crítica especializada en Berlín, a punto de calificar a Chile como «superpotencia» de la cinematografía a través de ambos cineastas.
Luego que se estrenara el domingo pasado El botón de nácar, el documental de Guzmán, secuela de Nostalgia de la luz, se disparó al segundo lugar en las preferencias de la crítica de la revista del festival, Screen, tras la británica 45 Years.
Ayer le correspondió el turno a Larraín, con El Club, un intenso filme sobre un grupo de sacerdotes retirados del ejercicio por pederastia u otras atrocidades, que fue recibido con fuertes aplausos tras el pase ante los medios.
Para Constanza Arenas, directora de CinemaChile, el recibimiento de los filmes nacionales, marca un hecho histórico.
«Estamos en un momento mágico, emocionante. Los chilenos estamos muy orgullosos. No solo por tener dos películas a competición, que también, sino por la acogida recibida», dijo.
«Son dos películas muy distintas entre sí, de dos nombres de mucho peso para nuestro cine», añadió Arenas, quien recordó que, además de la presencia a competición, hay otras ocho producciones chilenas en distintas secciones de la Berlinale.
Latinoamérica es un plato fuerte en este festival, con cerca de 50 títulos en sus distintos apartados y cuatro títulos a competición: «Ixcanul», del guatemalteco Jayro Bustamante, y la coproducción mexicano-británica «Einsenstein in Guanajuato», de Peter Greenaway, además de las cintas de Larraín y Guzmán.
