Según la revista brasilera Veja
Debe meses de alquiler de su casa y miles de dólares por conciertos comprometidos que no realizó. Su hija, la cantautora Bebel, logró que su padre fuera declarado incapaz. Ahora quiere obtener la tutela provisoria de sus contratos y operaciones financieras.
Es uno de los grandes maestros de la bossa nova, pero está en graves problemas financieros. Joao Gilberto (Bahía, 1931), autor de dos clásicos, «Chega de saudade» y «Desafinado», vive uno de sus peores momentos, según un artículo del diario argentino Clarín.
Gilberto, el único sobreviviente del trío dorado del Olimpo del género junto a Vinicius de Moraes (muerto en 1980) y Antonio Jobim (fallecido en 1994), está «acechado por deudas y reclamos que lo llevarían a perder todo», según la nota que cita a la última edición la revista brasileña Veja.
Actualmente el músico, que ganó un Grammy en 1965 por su trabajo con el estadounidense Stan Getz, vive en una «absoluta penuria financiera» y su hija, la cantautora Bebel, logró que su padre fuera declarado incapaz.
Ahora quiere obtener la tutela provisoria de sus contratos y operaciones financieras.
Los abogados de la cantante aseguran que Gilberto debe unos 60 mil dólares por el alquiler de su departamento, está a punto de ser desalojado y vive en «condiciones miserables».
La propia Bebel comparó las condiciones de la casa de su papá con las de «un baño inmundo».
No es su único problema. El músico además fue condenado a pagar unos 380 mil dólares en concepto de indemnización por conciertos cancelados por él.
Algunos de ellos corresponden a los que debía brindar con motivo de sus 80 años, en 2011, y que suspendió por cuestiones de salud, aunque «Joao también es conocido por sus desplantes en medio de sus presentaciones, cuando se siente disconforme con las cuestiones acústicas», escribe Clarín.
Por otro lado, el tema se complica porque el músico está inubicable, ya que no abre la puerta de la casa que comparte con la portuguesa Maria do Céu Harris.
«El objetivo de la interdicción es poner fin a los negocios temerarios que Joao venía siendo empujado a firmar, que dieron como resultado la condición casi miserable en la que vive», señala Bebel.
Hace una década que el músico no lanza nuevo material. Uno de sus últimos discos fue «João Voz E Violão» (2000), que fue producido por Caetano Veloso.
