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Escritora nigeriana feminista Ngozi Adichie: «Es hora de que los hombres lean a las mujeres» CULTURA

Escritora nigeriana feminista Ngozi Adichie: «Es hora de que los hombres lean a las mujeres»

Con un alegato a favor de la pluralidad y el empoderamiento de las mujeres, la aclamada escritora nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie inauguró, en Fráncfort, una Feria del Libro que se anuncia política y reivindicativa.


En la cita cumbre del mundo editorial, que abre sus puertas oficialmente este miércoles, la escritora e icono feminista lamentó que las historias de las mujeres sigan sin ser escuchadas a pesar de que en la actualidad muchas de ellas se han atrevido a hablar:

«Las mujeres todavía son invisibles. Sus experiencias todavía son invisibles», subrayó la autora de la «Flor Púrpura», «Amerikanah» y «Todos deberíamos ser feministas».

Cuando se cumple un año del movimiento #MeeToo, que sacudió a la industria del cine estadounidense para propagarse posteriormente a escala global, Adichie opinó que todavía «queda mucho por hacer» y en este sentido animó a los hombres a leer literatura escrita por mujeres.

«Necesitamos una gran variedad de voces. Los estudios dicen que las mujeres leen obras escritas por mujeres y por hombres pero que los hombres solo leen historias escritas por otros hombres», explicó.

«Es hora de que los hombres lean a las mujeres», sentenció quien está considerada una de las grandes voces literarias del siglo XXI, por abordar desde una perspectiva muy diferente debates sobre la inmigración, el sexismo o la problemática racial.

En una edición número 70 de la Feria del Libro de Fráncfort especialmente comprometida con la defensa de los derechos humanos y la libertad de expresión, para lo que ha emprendido incluso una campaña especial con el apoyo de la ONU, la escritora nigeriana llamó a evitar los eufemismos:

«Tenemos que llamar a las cosas por su nombre», dijo. «Hay que decir la verdad y a una mentira debemos llamarle por su nombre», recalcó la autora de 41 años, cuyas obras han sido traducidas a más de una treintena de idiomas.

«El peligro de la historia única»

La conferencia de prensa inaugural estuvo marcada por estos dos temas centrales, no solo con la presencia de la escritora nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie como invitada especial, sino también en las presentaciones del presidente de la Asociación de Libreros Alemanes, Heinrich Riethmüller, y el director de la Feria, Jürgen Boos.

Riethmüller empezó aludiendo a uno de los títulos de Ngozi Adichie, «El peligro de la historia única», y dijo que ya el título de ese libro apunta a uno de los grandes retos actuales:

«Ella nos muestra una táctica que muchos utilizan para discriminar a otros en la medida en que tratan de describirlos con una sola historia o en generalizaciones como cuando se dice que todos los africanos son pobres o todos los musulmanes son violentos», dijo Riethmüller. «Todas esas generalizaciones no sirven para entender la realidad y además son peligrosas», agregó.

Por ello, según Riethmüller, el sector del libro, en su compromiso con los Derechos Humanos, debe esforzarse por que se cuenten «multitud de historias». Luego, Riethmüller abordó el tema de la libertad de expresión que, dijo, «se viola con frecuencia» y mencionó concretamente el caso de Turquía:

«Sin duda hay que celebrar que algunos escritores y periodistas que estaban presos hayan sido puestos en libertad. Pero deberían ser liberados todos, Turquía sigue siendo el país con más gente de la cultura en la cárcel», dijo.

Boos, por su parte, puso como ejemplo de la forma en la que el mundo del libro puede combatir intentos por imponer una historia única la reacción de algunas librerías estadounidenses cuando el presidente Donald Trump calificó algunos países de «países de mierda»: «Trump habló de países de mierda y las librerías reaccionaron exponiendo en sus mesas literatura de esos países», dijo Boos.

Elogió también un reciente ensayo del poeta judío-alemán Max Czollek titulado «Desintegraos»: «Ese es un libro que abre una polémica contra una cultura dominante e invita a aceptar la diversidad y a asumir los abismos a través de los cuales tenemos que intentar comunicarnos», dijo.

Hasta el domingo, la ciudad alemana a orillas del río Meno estará tomada por unos 7.500 expositores procedentes de más de un centenar de países que se darán cita en el recinto ferial en el que se celebran unos 4.000 de eventos -entre lecturas, conferencias, foros de discusión y presentaciones- que buscan saciar la sed de narrativa de cerca de 300.000 visitantes.

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