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Coleccionistas abren al público muestra de comics de un siglo: «Chile estuvo en la vanguardia en el siglo XX» CULTURA

Coleccionistas abren al público muestra de comics de un siglo: «Chile estuvo en la vanguardia en el siglo XX»

Son más de 90 obras de autores tan conocidos como Pepo, Lukas, Themo Lobos, Vicar o Coke, fechadas y publicadas entre 1905 y 2000. Este patrimonio artístico es presentado por La Factoría del Cómic, agrupación que reúne las obras originales de Leopoldo Muñoz y Cristián Maturana, quienes han dedicado gran parte de su vida a reunir los originales.


Una muestra de un siglo de comics e ilustración chilena se puede ver actualmente en la exposición «El noveno arte», que se realiza en la Casa-Museo Santa Rosa de Apoquindo.

Este patrimonio artístico es presentado por La Factoría del Cómic, agrupación que reúne las obras originales de dos acuciosos coleccionistas privados, Leopoldo Muñoz y Cristián Maturana, quienes han dedicado gran parte de su vida a reunir los originales fechados entre 1905 y 2000.

«La exposición surge de la amistad y obsesión que compartimos con Cristián por los dibujos originales de cómics, historietas o ilustraciones», comenta Muñoz.

«Nos conocemos hace tiempo por coincidir en festivales de cine, incluso hemos trabajado juntos en cortometrajes, y como siempre conversamos de tal o cual dibujo, pensamos que sería interesante poder compartir con la comunidad de este arte en que Chile estuvo en la vanguardia en el siglo XX. Por eso, nos asociamos en la Factoría del Cómic, un espacio para la divulgación y el aprecio de dibujos originales», dice.

La exposición «El noveno arte» reúne más de 90 obras de autores, fechadas y publicadas entre 1905 y 2000. Fue pensada de manera temática y está dividida en 9 secciones: Los precursores del siglo XX, Infantil, Picaresco, Político, Aventuras y Ciencia Ficción, El Peneca, El siniestro Dr. Mortis, Mampato y Condorito.

Según Maturana, “nuestro país tiene historia y significativa tradición en el noveno arte. Hemos sido productores de artistas de fama mundial como Vicar y Arturo Pérez del Castillo, por nombrar solo algunos. Pero también contamos con un sinnúmero de dibujantes, cuya creatividad y talento compiten de igual a igual con mitos de talla mundial. Estas son razones de peso para que marcas como Disney, durante años, utilizaran a talentos nacionales para revistas como El Zorro, Tío Rico, y otras”.

Para Muñoz, “es un orgullo poner a disposición de las nuevas generaciones estas obras que, no sólo son originales, sino que recorren buena parte de la historia chilena del Siglo XX. Es una buena ocasión para que distintas generaciones se reúnan y reconozcan frente al Noveno Arte”.

Un tesoro

Maturana explica que quisieron titular la exposición como «El noveno arte», porque es la denominación que se «ganó» el dibujo para medios de prensa, luego que importantes teóricos como Óscar Masotta, entre otros, a mediados de los 60 asumieran la esencia y lenguaje artístico de esta expresión gráfica sobre papel. «Y nos pareció que era el título que correspondía a este tesoro, aún para muchos desconocido».

Algunos de los dibujantes cuyas obras estarán presentándose en Santa Rosa de Apoquindo Pepo, Lukas, Oskar, Themo Lobos, Mario Igor, Alberto Vivanco, Hervi, Ric, Coré, Eduardo Armstrong, Enrique Melcherts, Eduardo de La Barra, Fantasio, Arturo Pérez del Castillo, Juan Francisco Jara y otros.

«Vale poner énfasis, en que la expo muestra una técnica casi extinta en la actualidad que es el dibujo a mano -hoy se hace casi todo en computador-, y que ese fenómeno se replica también en la plataforma en que eran publicados, el papel», indica Muñoz.

El conjunto de obras expuesto parte del trabajo de cada uno de los artistas en clásicas revistas chilenas. Desde la fundamental y longeva El Peneca, pasando por la mítica Mampato y la terrorífica Doctor Mortis, a las de humor político como Topaze y La comedia humana, y también publicaciones de humor picaresco como El pingüino y Can Can.

Otro destacado son los originales de Condorito, la revista más internacional de las caricaturas chilenas.

Además, la exposición integra dibujos originales de suplementos de diarios nacionales, como Pocas Pecas de El Mercurio, Icarito de La Tercera, Remolino de Las Últimas Noticias y otros que fueron inspiradores para el aprendizaje escolar debido al uso de dibujos y enseñanzas, y también publicaciones más contraculturales como Ácido, Bandido y Trauko, que ahora retorna de su silencio.

Vanguardia

El cómic fue una de las grandes revoluciones en el entretenimiento y en la cultura popular en el siglo XX y para Muñoz  «Chile estuvo en la vanguardia». Las caricaturas e ilustraciones fueron, durante todo el siglo pasado, el gancho para que millones de niños aprendiesen a leer.

Maturana destaca que la enorme producción de historietas se debía a que existía una lectoría formidable en Chile.

«Hablamos de millones de ejemplares, con una industria competitiva, con dibujantes que también trabajaban para grandes cadenas editoriales como Fleetway», subraya. «Se debe recordar que, por ejemplo, Condorito es el referente absoluto de nuestros dibujos de exportación -en cada país latinoamericano donde se editó, sus lectores creen que Condorito es compatriota de ellos-, pero también sucedió algo similar con El siniestro Dr. Mortis».

Además recuerda que el propio Walt Disney vino a Chile y se juntó con algunos artistas nacionales para comercializar, o derechamente ofrecerles trabajo en Hollywood, entre ellos Coke, Mono, Pekén y Pepo. Además, en la década de los 60 y principios de los 70, no sólo se comercializaban revistas Disney en Chile, sino también dibujantes nacionales trabajaban para esas publicaciones, como en el caso de El Zorro.

El cómic y el golpe de 1973

Todo este panorama cambiaría bruscamente a partir del Golpe de Estado de 1973 y el consiguiente «apagón cultural», que para Muñoz está lejos de ser «una metáfora».

«Literalmente se cerraron editoriales, revistas y diarios y los dibujantes vivieron una época muy difícil, al igual que el resto de los chilenos, quizás con la particularidad de que los artistas de historietas dependían de las publicaciones», dice.

«Testimonio de ello se refleja en una carta de Máximo Carvajal que se exhibe en la exposición, en la cual solicita trabajo a El Mercurio en 1976 y detalla su experiencia, tiempo en que ya era un connotado y avezado dibujante, por no tildarlo de maestro prematuro», rememora.

El caso de Máximo Carvajal (1935-2006) es significativo. Miembro del Partido Comunista, fue preso político y se hizo una campaña por su liberación en la que firmaron diversos artistas, incluso de veredas políticas opuestas como Lukas, y también extranjeros de talla mundial como Moebius, añade.

Legado actual

Consultado sobre el legado del cómic chileno, Maturana responde que «es un tesoro vivo, por varias razones».

«Una de ellas es que nivel global, es el fenómeno del coleccionismo de dibujos originales en el mundo es un actividad en alza, y que en nuestro país en ese sentido posee una identidad propia y enorme riqueza», señala.

En el aspecto local y pensando en el futuro, en esta exposición y a través de los dibujos del siglo XX «podemos entender nuestro pasado reciente, disfrutarlo a través de su trazo, imaginación y humor».

«Las características como registro histórico y sus tintes sociológicos son un tremendo rescate para nuestra identidad nacional», resalta.

Además los dibujos en sí son un detonante para incentivar la lectura en los más jóvenes, pues el dibujo es un anzuelo que despierta la imaginación y las ganas de continuar con el hábito, añade.

Eso sin contar el legado en el arte, que se traduce en la inspiración para las generaciones de dibujantes que está produciendo obras en la actualidad.

«Existe una generación diversa de autores, desde fines de los ochenta hasta ahora, donde nombres como Christiano, Leo Ríos, Karto, Vicho Plaza, Fyto Manga, Fabio Power y McLaud entre otros o fueron discípulos de los maestros del siglo XX o son referentes obligados en su formación», concluye.

Coordenadas

Fecha: 22 de junio al 25 de agosto de 2019
Lugar: Sala de Exposición. Casa-Museo Santa Rosa de Apoquindo
Padre Hurtado Sur 1195 / Visviri 1200
Teléfono: 22 896 98 90
Horario: Martes a domingo, 10:30 a 19:00 horas
Entrada: Liberada
www.culturallascondes.cl

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