CULTURA|CIENCIA
La académica de la Universidad de Oslo estará en Chile para participar en la conferencia internacional que por primera vez se realiza en un país en desarrollo, para debatir sobre los cambios que debe asumir la sociedad para adaptarse al cambio climático. «Espero que el encuentro muestre las últimas tendencias y hallazgos en investigación y ayude al desarrollo de colaboraciones y un sentido de comunidad», dice en esta entrevista.
Optimista sobre la conferencia internacional «Transformations» –que se realizará por primera vez en un país en desarrollo, en este caso Chile– está la experta en cambio climático Karen O’Brien, uno de las impulsoras del evento.
La reunión se realizará en la antesala de la cumbre climática mundial COP25, de diciembre próximo, también en Santiago, y «reunirá en Chile a una gran comunidad de investigadores de todo el mundo, que están interesados y comprometidos con las transformaciones hacia un mundo equitativo y sostenible», expresó la académica de la Universidad de Oslo.
La experta está interesada en cómo los enfoques transdisciplinarios e integrales para la investigación del cambio global pueden contribuir a una mejor comprensión de cómo las sociedades crean y responden al cambio, y particularmente el papel de las creencias, los valores y la visión del mundo en las transformaciones hacia la sostenibilidad.
Tras celebrarse en Oslo (2013), Estocolmo (2015), Dundee (2017), la cuarta versión del evento se desarrollará la próxima semana en la Universidad de Chile, desde el 16 al 18 de octubre.
Estará centrada en las transformaciones que requiere la sociedad global para enfrentar el cambio climático, en consonancia con el Acuerdo Climático de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
«Espero que el encuentro muestre las últimas tendencias y hallazgos en investigación y ayude al desarrollo de colaboraciones y un sentido de comunidad», dice.
El objetivo de la conferencia es el compromiso con el aprendizaje sobre cómo usar el conocimiento para crear un mundo donde humanos y no humanos se pueden desarrollar, según O’Brien.
«La ciencia demuestra cómo estamos transformando el mundo mediante el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, el cambio del uso de suelo, la polución marina y otros efectos de la actividad humana», recalca.
«Necesitamos una ciencia que muestre que podemos tomar acciones para reducir estos riesgos y crear sistemas que sean sostenibles. Hay una ciencia de transformaciones que destaca el papel de la gente en el diseño y liderazgo de soluciones, la importancia de las historias y narrativas, el papel del poder y la política, y el significado tanto de la acción individual como colectiva».
Sobre la inédita realización del evento en Chile, la académica destaca que por primera vez se celebra en el Hemisferio Sur, y la importancia de que sea específicamente en América Latina.
Para ella, esta es una región con una gran riqueza de conocimiento y experiencia vinculada a las transformaciones, por lo que espera un debate vibrante que pueda informar sobre la investigación científica y las políticas.
«El concepto de ‘transformaciones’ en sí mismo llama la atención sobre la importancia clave del lenguaje y las narrativas que con frecuencia han sido usadas para colonizar mediante modelos e influencia sobre cómo nos relacionamos entre nosotros mismos y con el mundo».
O’Brien recuerda que conceptos como “desarrollados” y “no desarrollados” no son neutrales, y con frecuencia son aplicados por instituciones económicas, e ignoran o socavan la capacidad transformadora de cada persona y grupo para modificar sistemas y culturas.
La académica reconoce que, a pesar de la evidencia científica, actualmente muchas personas niegan el cambio climático, o creen que es un fenómeno que afecta a otros.
«Es fácil externalizar el cambio climático y pensar que no se trata de ‘nosotros'», dice. «Sin embargo, más y más gente ahora reconoce que los impactos no son lejanos en tiempo y lugar», puntualiza.
La académica subraya que el cambio climático es un problema sistémico que afecta a todos, debido a la interconexión de culturas, sociedades y economías.
«No es fácil hacer que ‘la gente cambie’, con frecuencia este enfoque es contraproducente», acepta. «Es más fácil inspirar y dar un sentido de voluntad, de capacidad de acción, y comprometer a las personas a dejar sistemas y culturas que no son sostenibles y que contribuyen a la vulnerabilidad de muchos pueblos y especies».
En este contexto, uno de los debates que actualmente involucra este tema es la cuestión de si el capitalismo y la ecología son compatibles. O’Brien no rehúye este tema.
«Es una pregunta importante», indica. «Cualquier ‘ismo’ que socave sistemáticamente los sistemas ecológicos debe ser cuestionado», responde.
«Los temas sociales y ecológicos no están separados, y la forma en que organizamos la economía y la sociedad reflejan lo que valoramos y lo que no. Para enfrentar con éxito los temas ambientales debemos centrarnos en valores universales que se aplican a todos, como equidad, dignidad, justicia y compasión. Estos son los valores que nos conectan como humanos».
Y agrega: «Actualmente, el capitalismo es guiado por valores que nos desconectan a los unos de los otros, y del medio ambiente».
Finalmente, también es optimista sobre la cumbre climática COP25, que se celebrará en Santiago en diciembre próximo.
«La coincidencia de la conferencia Transformations 2019 y la COP25 es una excelente oportunidad para iniciar un conversación seria sobre las oportunidades de transformación entre los responsables de las políticas», resalta.
«El liderazgo transformacional es un tema clave que será abordado en la conferencia, y es emocionante que Chile esté tomando un papel de liderazgo en el desarrollo de una estrategia de largo plazo para la descarbonización. Dado que ya sentimos los impactos climáticos en todo el mundo, espero que los debates en la COP25 entretejan las discusiones sobre la adaptación al cambio climático, la mitigación y la necesidad de transformaciones para la sostenibilidad».
