CULTURA
Con distintas estéticas y tonos, alcanzan miles de reproducciones en internet, y van desde el documental a la ficción. Además del trabajo de Sebastián Pereira, el W-Fest contará con la participación de «Disidentes» (obra de un colectivo audiovisual integrado, entre otros, por Constanza Torres) y «Silvia y la normalidad», de Bernardita Olmedo. Este lunes algunos de estos creadores serán parte de un conversatorio previo al festival, en el marco de un nuevo aniversario del 18 de octubre.
«Los enemigos poderosos e implacables», de Sebastián Pereira, «Disidentes» (de un colectivo integrado, entre otros, por Constanza Torres) y «Silvia y la normalidad», de Bernardita Olmedo, son tres webseries que tienen algo en común: hacen alusión, en distintos grados, al estallido social, y serán parte de un festival del género, el W-Fest, organizado por el sitio otrasseries.cl, que se realizará del 13 al 18 de diciembre.
Con distintas estéticas y tonos, alcanzan miles de reproducciones en internet, y van desde el documental a la ficción.
Este lunes serán parte de un conversatorio previo al festival, en el marco de un nuevo aniversario del 18 de octubre, a las 17:00 horas, a través de Instagram.
«Silvia y la normalidad», por ejemplo, fue estrenada el 5 de noviembre de 2019, al calor de las movilizaciones, aunque no está centrada exclusivamente en el movimiento social.
Fue ideada por Olmedo, guionista, realizadora, profesora de comunicación audiovisual y viñetista, conocida por su personaje Bruta y su libro De preferencia, solterona (Lumen, 2019).
Esta serie se compone de un conjunto de cortos centrados en un personaje interpretado por la actriz Pamela Barboza, quien se hizo conocida por ser parte, como actriz y cocreadora, de otra exitosa webserie: «Psicóticas inseguras».
«Nosotras teníamos una temporada completa de ‘Silvia…’ ya grabada y en una primera versión de montaje, que íbamos a estrenar en octubre por Nano, pero pasó el estallido y en una reunión Cristóbal Ross (director de Nano y productor ejecutivo de ‘Silvia…’) nos planteó que era mejor no estrenarla y hacernos cargo como comunicadores de lo que (nos) estaba pasando. Ahí decidimos hacer capítulos enfocados en la contingencia», cuenta Barboza.
En el segundo capítulo de la serie, por ejemplo, la protagonista se pregunta si la acción en redes sociales es suficiente como manifestación social en el marco de la contingencia de esos días.
«El mayor desafío estuvo en trabajar sobre un momento histórico que sucedía ante nuestros ojos, que cambiaba de un momento a otro y que anímicamente nos llevaba de la euforia a la depresión. Supongo que, al ser solo dos, pudimos apañarnos y controlar de mejor manera lo que nos pasaba y lo que finalmente queríamos decir. Quizá con un equipo más grande todo se hubiese desbordado», comenta Olmedo.
Más en la línea de la ficción va «Los enemigos poderosos e implacables», donde varios personajes –interpretados por Valentina Catalán, Célia Jesupret, Tamara Torrejón, Daniel Álvarez y Sebastián Troncoso– interactúan en un espacio teatral, mayormente a través de diálogos, y que incluso contó con la participación de la «Tía Pikachu», la actual constituyente Giovanna Grandón.
«Eran personajes iconos de la movilización, así como todos los demás que fueron apareciendo», explica Pereira.
«La ‘Tía Pikachu’ era una personaje muy querida y que esperabas verla todos los viernes. Nos parecía interesante invitarla a actuar. Ella era muy representativa para nosotros, por su historia de vida, y por la convicción que tiene. Y sin ella querer serlo, el traje de Pikachu era más performático y gracioso que todas las ideas que tenían ‘Los Enemigos…’. Entonces era perfecto para que fuera la madre de unos de los personajes. Hoy día verla dentro de la constituyente es muy emocionante, y la serie adquiere un valor especial. Imagínate que el único personaje que invitamos a actuar, tiempo después se convierta en un personaje relevante para el proceso de escribir la nueva Constitución, que es con lo que soñábamos al hacer la serie».
Él recuerda que, tras el inicio del Estallido, «muchos audiovisuales llevábamos algunos meses en las calles registrando y era tan impactante lo que estaba pasando, que fue necesario una válvula de escape con la ficción», cuenta Pereira.
En ese tiempo, una compañía de teatro detuvo sus ensayos para abrir un espacio de contención y reflexión llamado “Evitar la Normalidad”, y ahí se armaron distintos tipos de talleres de acciones artísticas.
«Desde ahí yo convoqué un taller de creación audiovisual, donde conocí a un grupo de actores muy talentosos con lo que comenzamos a trabajar; proponiéndoles un proceso a la inversa, la actriz-actor primero, luego el guión. Hicimos primero un video sobre la ‘Navidad Negra’, en apoyo a las víctimas de trauma ocular. Y después de eso seguimos trabajando alineados con las demás intervenciones que se estaban realizando, y encontramos el tono que estábamos buscando. Un híbrido entre ficción y documental que resultó siendo ‘Los Enemigos Poderosos e Implacables'».
Más centrado en el documental está «Disidentes», obra de realizadoras y realizadores de Milla Films y Colectivo Vlopcinema. Torres cuenta que «la serie nació desde la urgencia de salir a la calle, de ser parte de este momento histórico y registrar lo que estaba pasando, de contar lo que la tele no estaba contando».
Explica que el nombre de la serie se debe a que «pone como protagonistas a las personas que, cansadas de un sistema corrupto y patriarcal, se tomaron las calles y alzaron la voz».
«La filmación se realizó en plena revuelta popular, sin presupuesto y resistiendo la dura represión que se vivía en las calles. La mayor parte del tiempo registré sola, lo que me llevó a sobreponerme al miedo y al cansancio tras pasar largas horas bajo el sol, escapar de las lacrimógenas e incluso ser apuntada por un arma solo por el hecho de portar una cámara».
Esteban Font, otro miembro del colectivo, relata que la estética en blanco y negro de la serie «surge con la idea en representación a la bandera negra chilena, símbolo de la resistencia del estallido social. Por otro lado, se implementó esta estética para homenajear al documental ‘La batalla de Chile’, debido a que también fue un documental creado en base a un registro fílmico».
«El objetivo principal de la serie es dejar un registro en primera persona de lo acontecido en esos días. Para nosotres es importante mantener la memoria viva de nuestra historia y no olvidar lo que sucedió», remata.
«Las personas que participaron fueron múltiples compañeros en la calle filmando con diversos dispositivos y captaciones, utilizamos un sonido que fue grabado los primeros días, que compartió un sonidista para diferentes proyectos, nos envían material amigos, pero todo en relación a las temáticas que fuimos abordando, más lo que filmamos nosotros, yo creo que lo más difícil va a ser soportar la represión y estar grabando», complementa Daniel Ohtonqui.
Todos ellos tienen además diversas expectativas sobre el proceso constituyente en marcha.
«Espero que se recojan todas las demandas sociales que se han venido pidiendo hace años, que se protejan los derechos del agua, el derecho a la salud, educación, que sea una Constitución ecologista y feminista, que se respeten a los pueblos originarios», dice Barboza.
Olmedo aspira a la concreción de «todo por lo que hemos venido luchando: equidad, justicia, dignidad. Pero también espero que se les deje hacer la pega, que el proceso no se contamine y que por favor no nos decepcionen».
Pereira, por su parte, está «muy optimista». «Es muy difícil que salga algo peor de lo que tenemos. Siento que este proceso es muy convocante y participativo, pero el grave error de un convencional agudizó la obsesión que existe de un sector por deslegitimarla. Por eso creo que debemos cuidarla y defenderla en todos los espacios que podamos, y no perder de vista lo que se ha logrado, como los que cobardemente agredieron a Giovanna. Lo triste es sentir que estaba pasando algo muy interesante y profundo socialmente, pero el desgaste del encierro y los miles de fallecidos por COVID, nos ha quebrado, todo se ha vuelto demasiado frágil, y las fuerzas se han disipado», dice.
A Torres le gustaría que ocurran los cambios «por los que tanto hemos luchado, especialmente los que tienen que ver con derechos de las mujeres, el reconocimiento de las labores de cuidado, mejoras en el sistema de salud, la educación, la cultura y la ecología».
«Hay mucho por mejorar todavía y va a tomar tiempo, pero creo que es un primer paso, sin embargo lo más importante es que esos cambios se vean reflejados en la vida cotidiana y no solo en el papel», concluye.
