Artista Macarena Calvo: “hay que pensar el futuro de las ciudades con equipos multidisciplinarios”

Macarena Calvo, encargada -junto a su socio, el paisajista ecosistémico Cristóbal Elgueta- de ecología y paisaje del pabellón chileno en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2023, cuenta la experiencia de llevar “Moving ecologies” a la instancia internacional, que pretende ser un espacio donde la arquitectura y el paisajismo confluyen para generar ciudades del futuro basadas en la utilización de especies nativas.

– ¿De qué se trata la Bienal de Arquitectura este 2023?

– La Bienal de Arquitectura de Venecia 2023, bajo la curatoría de Lesley Lokko, tiene como tema este año el “Laboratorio del futuro” en donde cada país interpreta el llamado con su visión y problemáticas locales, generando un espacio de reflexión en torno a la arquitectura. El pabellón de Chile fue realizado por un equipo cuyos curadores son Loreto Lyon, Alejandro Beals y Gonzalo Carrasco bajo el título de “Moving ecologies” en donde se trabajó el laboratorio del futuro como un espacio en el que la arquitectura y el paisaje se unen para generar las ciudades del presente y del futuro.

– Usted asistió a la inauguración del evento, ¿Cómo fue la experiencia de compartir con otros proyectos de todo el mundo? ¿Hubo alguno semejante?

– Es muy interesante darse cuenta que las temáticas se repiten y que hay muchas similitudes como, por ejemplo, el pabellón vecino a Chile, Irlanda, en donde se hablaba de la cultura de unas islas remotas con su biodiversidad, sus tradiciones locales y el delicado equilibrio entre cultura y naturaleza y, en general, el tema de la danza, expresiones corporales, el concepto de descolonización, y temas ambientales fueron recurrentes.

– ¿Cuáles son los aprendizajes que rescata de esta experiencia que se puedan replicar en la región de Valparaíso?

– Lo que más rescato es el nexo que se generó entre arquitectura y paisaje entendiendo que tal como las plantas y los animales forman parte de un ecosistema, no se puede pensar arquitectura sin paisaje, ni paisaje sin arquitectura. Es decir, la forma de pensar el futuro de nuestras ciudades, es con equipos multidisciplinarios, con respeto y con innovación. La educación ambiental también es clave y la región de Valparaíso tiene un enorme potencial ya que cuenta con relictos de bosques nativos, parques nacionales, con el jardín botánico y con reservas naturales.

La importancia de iniciativas regionales

Una de las iniciativas presentes en el pabellón nacional fue el Laboratorio Vegetal Las Salinas que bajo el lema “Laboratorios del futuro” de la Bienal, llega como “una instancia de reflexión, en donde nos planteamos cómo queremos construir la ciudad y qué especies serán las protagonistas”, comenta la experta en esta entrevista.

– ¿Cómo fue seleccionado el proyecto para presentar en el pabellón nacional?

– El proyecto fue seleccionado mediante un concurso público convocado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y Patrimonio, en el que participaron alrededor de 15 iniciativas. En esa instancia el proyecto “Moving ecologies” resultó ganador. El proyecto consiste en un campo de semillas que se muestran en el pabellón y que hablan del rol de ciertas especies nativas en la restauración ecológica. Por otra parte hay una mesa larga con un gráfico de “campo de contingencias” que narra eventos que han sucedido en Chile y que a partir de los cuales se han generado proyectos de arquitectura del paisaje innovadores y experimentales, como es el caso del Laboratorio Vegetal Las Salinas.

– ¿Por qué el Laboratorio Vegetal pudo participar en esta instancia y qué quisieron reflejar en su exposición?

– Los curadores seleccionaron 12 proyectos que, de alguna forma, representan la actualidad chilena que refleja una forma de hacer paisaje innovadora y sensible con el medio ambiente y que es respuesta a muchos sucesos ambientales. Como parques que se han construido, por ejemplo, después de catástrofes naturales o proyectos que buscan la restauración ecológica de un lugar.

En el caso de restauración está el Laboratorio Vegetal Las Salinas, que tiene justamente la condición de “laboratorio” en donde se pretende experimentar, analizar y sacar conclusiones más que hacer un proyecto terminado. Es un modelo que puede ser replicable en la ciudad y que busca generar educación ambiental.

– ¿Cuál es la importancia para la Región de Valparaíso de participar en la Bienal 2023?

– Creo que el Laboratorio Vegetal Las Salinas es justamente una instancia de reflexión, en donde nos planteamos cómo queremos construir la ciudad y qué especies serán las protagonistas. Cuál es el rol del paisajismo en la ciudad, ya no hay una búsqueda sólo de un fin estético, sino que se busca ser parte armónica de un ecosistema que debemos proteger y restaurar.

Además, la Región de Valparaíso tiene un patrimonio vegetal importantísimo y es parte del “hot spot mediterráneo” es decir es un lugar cuya biodiversidad tiene prioridad de conservación en el mundo y se encuentra amenazada. Poner en valor este patrimonio, cuidarlo y difundirlo a nivel mundial es parte de la importancia de tener un proyecto local elegido como uno de los que representan la escena del paisajismo chileno en la Bienal.

– ¿Cuál fue la recepción que tuvo el proyecto en la apertura de la Bienal?

– El proyecto tuvo excelente recepción, la gente vio las esferas con semillas en su interior y de inmediato hacían el paralelo entre la semilla y una joya (por la forma en cómo estaban expuestas las semillas). También algunos medios internacionales nombraron al pabellón de Chile entre los 15 imprescindibles de ver, lo que es sin duda una gran noticia dado el alto nivel de la muestra.

– ¿Cuáles son las proyecciones del Laboratorio Vegetal para la Región y para otras zonas de Chile?

– El Laboratorio Vegetal Las Salinas nos muestra la importancia de valorar nuestra flora nativa y que ésta sí puede funcionar bien como complemento a las especies exóticas en el paisajismo urbano. También nos habla de que el diseño de áreas verdes para espacio público debe tener una responsabilidad desde el punto de vista ecológico y social. Así es como nos vemos beneficiados con los “servicios ecosistémicos”.

Para saber más de lo que está pasando en el mundo de la ciencia y la cultura, súmate a nuestra comunidad Cultívate, el Newsletter de El Mostrador sobre estos temas. Inscríbete gratis AQUÍ