
El Gobierno saca a la ex asesora de Dávalos que culpó al ministro del Interior por reacción tardía en el caso Caval
Erika Silva fue removida de su puesto en la Dirección Sociocultural de la Presidencia luego de ocupar su cuenta de Twitter para contar detalles de lo ocurrido entre su repartición, la familia presidencial e Interior, después que se desatara el caso Caval. La funcionaria afirmó que Bachelet no supo a tiempo el impacto de lo que ocurría por culpa de Peñailillo.
Era muy previsible. Esta mañana Erika Silva usó su cuenta personal de Twitter para lanzar un detallado relato de lo que ocurrió después que estalló el caso Caval, el 6 de febrero, que involucraba directamente a su jefe, Sebastián Dávalos, el hijo de la Presidenta Michelle Bachelet.
La ex jefa de gabinete, que se quedó en La Moneda luego de la salida de Dávalos desde la Dirección Sociocultural de la Presidencia, hoy en la mañana posteó «Buenos días comunidades!! Desde el Palacio de La Moneda, la Casa de todas y todos los chilenos». Y luego cambió el tono sobrio y los posteos esporádicos, para comenzar a contar en mensajes sucesivos lo que ocurrió a partir del día en que el negocio inmobiliario salió en la prensa.
El motivo fue apoyar la versión que Bachelet le entregó a Don Francisco, respecto de que, estando en Caburgua, no se enteró del impacto mediático que estaba teniendo el caso. La reacción tardía fue una de las principales críticas a la Presidenta, la que se reflejó en la baja aprobación que mostraron las encuestas. La versión de Silva es que directamente desde Interior se ordenó que las vacaciones continuaran para «dar la impresión de normalidad».
El relato dice que sólo cuando Erika Silva logró hablar con la Presidenta y pedirle entre lágrimas que le creyeran acerca de la gravedad que estaba tomando el caso en la opinión pública, la Mandataria decidió regresar a Santiago. «La Presidenta confió en el Ministro Peñailillo mientras estaba en Caburga. El Ministro Peñailillo no fue capaz de dimensionar el impacto. Lejos de Caburga todos veíamos el impacto mediático. Bueno, casi todos”, remató Silva. Publicar estos detalles le costó el cargo. Según informa La Tercera, la funcionaria fue removida del Gobierno.