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Carlos Montes da la batalla casi por perdida: es «tremendamente difícil» ganar la elección presidencial sin la Democracia Cristiana PAÍS

Carlos Montes da la batalla casi por perdida: es «tremendamente difícil» ganar la elección presidencial sin la Democracia Cristiana

El PS y La Moneda pasan por un momento álgido. Dimes y diretes en medio de la tramitación de proyectos estrella del Gobierno, justo en momentos en que sus socios históricos -la Democracia Cristiana- parecieran entenderse mejor con el Ejecutivo que con la misma oposición. Esta situación, para el jefe de los senadores socialistas, es el foco de los grandes temas, motivo por el cual respaldó que su colectividad haya condicionado las alianzas a acuerdos en las reformas tributaria, de pensiones y laboral; justo los temas que los dividen con la Falange. “Hay que asumir que la DC está con una visión de los temas, y una actitud hacia el Gobierno, distinta”, comentó el legislador.


La semana pasada se desarrolló el Pleno del Comité Central del Partido Socialista (PS). La instancia estuvo marcada, entre otras cosas, por un llamado a la «unidad de la oposición», el que tuvo un especial énfasis en el rol de la Democracia Cristiana (DC), aliada histórica de los socialistas, pero que en el último tiempo han visto cómo se tensan sus relaciones.

Y es que luego de que la falange votara en diversas oportunidades en línea con el oficialismo, incluso aprobando la reintegración del sistema tributario, a diferencia de buena parte del sector, desde la directiva de los socialistas acordaron, junto con distintos sectores de la colectividad, hacer una advertencia a los democratacristianos.

«Esperamos que en el Senado haya una conducta distinta», señaló en aquella oportunidad la senadora Isabel Allende.

Hoy, el jefe de los senadores del PS, Carlos Montes, se refirió a la relación de su partido con la DC. Esto sumado a que el legislador ha tenido que enfrentarse a distintas tensiones protagonizadas por su partido. La última: el quiebre de relaciones con La Moneda, cuando la ministra Cecilia Pérez pidió a la colectividad aclarar supuestos vínculos con el narcotráfico.

En entrevista con El Mercurio, el parlamentario aseguró que el foco tiene que estar puesto en los grandes temas, motivo por el cual respalda que el PS haya condicionado las alianzas a acuerdos en las reformas tributaria, de pensiones y laboral; justo los temas que los dividen con la DC.

“Hay que asumir que la DC está con una visión de los temas, y una actitud hacia el Gobierno, distinta”, comentó pese a que asegura que ganar las próximas elecciones sin el histórico aliado de los socialistas es muy difícil.

«Si ellos están entendiéndose con la derecha en torno al tema tributario, previsional; si ellos no están jugando un rol muy activo en la educación pública; si en el tema laboral no es claro, no hay que seguir esperando mágicamente ciertas cosas. El PS, junto a los que estén dispuestos a jugarse por estas cosas, debe coordinarse y levantar iniciativas», añadió.

Montes lamentó, además, que exista la posibilidad de un escenario en que el PS no esté con la DC, su aliado histórico.

«Lo encuentro muy grave porque la derecha en este país es fuerte no solo electoralmente, sino que también tiene poder económico», señaló. ¿Qué se requiere? A su juicio «una amplia alianza entre el centro y la izquierda. Pero no basta con esa convicción, sino que también se requiere que los aliados estén en esa actitud. Si la DC, su dirección, no está en eso, tenemos que asumirlo».

Consultado por si la DC podría quedar fuera de una alianza de oposición, el senador dice que este es el momento de coordinarse en torno a cada una de las reformas. «Si no se logran entendimientos con la DC, tendremos que entendernos los demás y tomar iniciativas todos los que estén. Ojalá se lograra con la DC, porque son fundamentales para mejorar este país; pero si la DC no quiere, ¿qué vamos a hacer?», cuestionó.

Montes concluyó que es «tremendamente difícil» ganar la elección presidencial sin la Democracia Cristiana pero «que diablos», dijo.

«Lo peor es estar soñando con algo que no existe. Después de la última elección, ya no tenemos un proyecto político común y hay que reconstruirlo. Eso supone la voluntad de los distintos actores para reconstruirla y son varios los que buscan más diferenciarse, posicionarse a sí mismos, que reconstruir un amplio entendimiento», finalizó.

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