Publicidad
Exministro Varela se suma a la escalada de la campaña del miedo y vaticina triunfo del rechazo: “La gente no se sube a una micro con un chofer encapuchado” PAÍS Crédito: Agencia UNO

Exministro Varela se suma a la escalada de la campaña del miedo y vaticina triunfo del rechazo: “La gente no se sube a una micro con un chofer encapuchado”

A través de una columna en el diario El Mercurio, el exministro de Educación apostó a que el rechazo va a ganar en el plebiscito y la gente común, que simbolizó en la “Señora Juanita”, finalmente se inclinará por esa opción a la hora de votar, debido al clima de “violencia desatada” que a su juicio impera en el país. “La única opción que asegura aislar a los violentistas, recuperar el orden y avanzar en la agenda social es un rechazo abrumador (…) El centro moderado y la gran clase media no están contentos con lo que ven, escuchan y sienten. Saben que en una constituyente la hegemonía la van a tener los termocéfalos y no los moderados; por eso, silenciosamente van a rechazar” dijo el actual secretario del directorio de la Fundación para el Progreso, el think tank del empresario Nicolás Ibáñez, sumándose a las declaraciones de otros personeros de la derecha que han intensificado la campaña del miedo de cara al 26 de abril.


El ex ministro de Educación, Gerardo Varela, quien dejó el gabinete en agosto de 2018 tras una gestión marcada por las polémicas reapareció con una columna de opinión en El Mercurio para sumarse a la “campaña del miedo” desde la derecha de cara al plebiscito constituyente del 26 de abril.

Desde esa tribuna, Varela apostó a que el rechazo va a ganar y la gente común, que simbolizó en la “Señora Juanita”, finalmente se inclinará por esa opción a la hora de votar, debido al clima de “violencia desatada” que a su juicio impera en el país. “El rechazo va a ganar porque la épica original por una mejor vida en un mejor país terminó como terminan todos los hechos de violencia, con más odio, división y cesantía: con metros quemados, sin farmacias ni supermercados y con los narcos y las barras bravas enseñoreándose en la calle”, comienza su texto el ex ministro de Educación.

En este sentido, el ex ministro –y actual secretario del directorio de la Fundación para el Progreso, el think tank del empresario Nicolás Ibáñez- se suma a la escalada de declaraciones de la derecha contra el “Apruebo”. Así lo ha hecho, la presidenta de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe, al advertir que “con estos niveles de violencia que hemos visto hoy día, una nueva Constitución tiene cero legitimidad” o el líder del Partido Republicano, José Antonio Kast, quien incluso lanzó una polémico campaña radial por el rechazo asegurando que  quienes están por una nueva  Constitución buscan “suprimir la libertad para emprender, para soñar, para vivir”

Varela ocupó el cargo de ministro de Educación por un lapso de casi cinco meses –entre el 11 de marzo de 2018 y el 9 de agosto de 2018- cuando fue removido en medio del cambio de gabinete. Sus frases planteando como solución a los problemas de la educación pública la fórmula de realizar bingos, así como también su declaración que sus hijos son unos “campeones” puesto que “necesitan a lo menos tres” condones, marcaron su fugaz trayectoria en el Mineduc.

“Hoy la calle tiene agotada a la mayoría”

En el texto, Varela afirma que “a riesgo de equivocarme – como no pocas veces en mi vida -, voy a aventurar que el rechazo va a ganar”. No porque exista mucho entusiasmo en torno a él, sino porque salvo por algunas minorías a-narco, comunistas, cualquier entusiasmo inicial de la gente moderada por tener la posibilidad de discutir en orden, con respeto y genuino espíritu democrático un nuevo pacto social, se desvanece día a día”.

En una clara campaña del miedo, el abogado sugiere que el apruebo no tiene respuesta frente a la violencia desatada. “Si algunos nos esperanzamos esa noche de noviembre cuando en vez de amanecer en estado de sitio amanecimos en estado de paz, ese entusiasmo se perdió” agrega, respecto al Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución sellado entre el oficialismo y la oposición el 15 de noviembre.

De igual forma advierte que cada viernes en que los encapuchados se “enseñorean en la Plaza Italia el rechazo crece. Con cada molotov en contra de un policía, el rechazo crece; con cada saqueo, barricada, PSU abortada e incendios de iglesias, el rechazo crece”.

El ex ministro también se refiere sobre las personas que se manifiestan en las calles y los actos de violencia, señalando que “hoy la calle tiene agotada a la mayoría que no vive en ellas, sino que las usa para transitar al trabajo, o que aspira a que sean lugares de convivencia cívica y no de violencia política. Los que han hecho de los espacios públicos sus espacios privados, que tienen sexo frente a la UC; usan de letrina el Parque Forestal; obligan a bailar, cobran peaje por transitar; los que impiden disfrutar del fútbol, los que no tienen nada mejor que hacer que tornarle la vida miserable al resto, no son mayoría, no les importa ni esta ni la próxima Constitución, y por eso van a perder”.

Asimismo, el ex ministro de Educación propone que la mayoría democrática y republicana que quiere una nueva Constitución de todos modos votará por el “Rechazo: “La mayoría silenciosa de Chile, que es pacífica, democrática y republicana, va a votar calladita y sin estridencia “Rechazo”, no porque no quiera cambiar la Constitución, sino porque quiere hacerlo en paz y mediante el diálogo y los acuerdos; esos que solo se pueden dar en el Congreso que elegimos, que delibera y cuyas reglas de funcionamiento las conocemos todos”.

“Por la misma razón que la gente no se sube a una micro con un chofer encapuchado, con destino desconocido y donde los pasajeros van gritando, tomando y piteando, los chilenos moderados y de pie van a votar “Rechazo”. Por la misma razón que nadie se operaría en una clínica infectada, ni comería en un restaurante insalubre, ni se jugaría su libertad o humanidad en un deporte donde no conoce las reglas, Chile no puede generar una nueva Constitución, que busca reencontrarnos jurídica y políticamente, en un escenario de violencia e intolerancia”, añade.

Según Varela, lo que la gente reclama en Chile es mejor salud, pensiones y educación; mejor trato y más respeto. “Ninguna de las deficiencias en estos temas es nueva ni deriva de la Constitución. Por eso, una discusión constitucional en medio de la violencia no le va a mejorar la vida a nadie, pero se la puede empeorar a todos, y eso la gente lo percibe, lo intuye y lo sufre en su vida cotidiana”, dice.

Del mismo modo para el ex ministro, la mayoría es pacífica y silenciosa porque “son más los que no encuentran nada digno en rayar un monumento, que no consideran que carabineros sean bastardos (ACAB), que admiran a otra primera línea: la que reconstruye en los terremotos, apaga los incendios forestales y enseña en colegios vulnerables, no la de los encapuchados que se dedican a funar y a saquear.”

Además deja entrever que votar por el “Apruebo” es aprobar la violencia: “El rechazo va a ganar porque la épica original por una mejor vida en un mejor país terminó como terminan todos los hechos de violencia, con más odio, división y cesantía; con metros quemados, sin farmacias ni supermercados y con los narcos y barras bravas enseñoreándose en la calle”.

“El rechazo va a ganar, porque la única opción que asegura aislar a los violentistas, recuperar el orden y avanzar en la agenda social es un rechazo abrumador. Va a ganar porque el centro moderado y la gran clase media no están contentos con lo que ven, escuchan y sienten. Saben que en una constituyente la hegemonía la van a tener los termocéfalos y no los moderados; por eso, silenciosamente van a rechazar” finaliza.

“Las elecciones las decide la señora Juanita, ella está peor que el 18 de octubre, su vida es más dura, más insegura, y el futuro más incierto. Hoy Chile es más pobre que hace tres meses. Chile cambió, pero para peor. Por eso, en la privacidad de la urna, en ese momento íntimo y solemne donde somos dueños de nuestro propio destino, la señora Juanita va a votar “Rechazo””, finaliza.

 

Publicidad

Tendencias