Publicidad
Kirchnerismo enfrenta su último año de gobierno y con Cristina culpable por corrupción MUNDO Crédito: Reuters

Kirchnerismo enfrenta su último año de gobierno y con Cristina culpable por corrupción

Publicidad

El Frente de Todos trata de recomponerse luego que la Vicepresidenta dijera que “no será candidata a nada” tras condena por caso de Vialidad. Sin embargo, mientras no exista un fallo judicial a firme, Cristina Fernández puede participar en el proceso electoral. La oposición derechista de Juntos por el Cambio también sufre divergencias internas.


La condena a la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) por el caso de Vialidad  y su declaración de que no será “candidata a nada” en 2023 removió los cimientos del kirchnerismo, que ahora deberá recomponerse en medio de sus disputas internas y definir las candidaturas para los comicios presidenciales y generales del año entrante.

Argentina irá el 23 de octubre próximo a elecciones presidenciales y generales, que decidirán la continuidad del kirchnerismo o si el país virará a la derecha, con un triunfo de la coalición Juntos por el Cambio. En la presidencial, si no hay ganador en primera vuelta, se realizará un balotaje un mes después. A partir de marzo también habrá elecciones regionales que servirán para examinar cómo se comienza a conformar el nuevo mapa político en el país trasandino.

Tres jueces federales condenaron el martes a seis años de cárcel y a la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos a Cristina Fernández, actual Vicepresidenta y líder indiscutida del oficialismo, por el delito de administración fraudulenta de fondos públicos para obras viales, pero la absolvieron en los cargos por presunta asociación ilícita. La ex Mandataria acusó a la justicia de ser “un estado paralelo y una mafia judicial”.

Aunque se esperaba el impacto político por el fallo, en el oficialista Frente de Todos (peronismo, izquierda) ya comenzó el debate por las posibles candidaturas presidenciales para suceder al Presidente Alberto Fernández y sobre la necesidad de una rápida implementación de políticas para superar el actual crítico momento político del kirchnerismo y la difícil coyuntura económica que atraviesa Argentina. La idea es levantar la imagen del gobierno, que en estos momentos tiene un rechazo de un 67% de la ciudadanía, según las encuestas, y que el 10 de diciembre en curso inició su cuarto y último año de gobierno.

Por su parte, la coalición Juntos por el Cambio, liderada por el ex Mandatario Mauricio Macri (2015-2019), intentará retomar el poder y cerrar las heridas de la derrota del año 2019, cuestión que los analistas también ven cuesta arriba dada las profundas divergencias internas que está mostrando dicho conglomerado.

El escenario electoral se ve complicado en Argentina, porque sus finanzas están en mal estado y la polarización no tiene visos de arreglo. Según economistas, la pandemia del Covid 19 y la guerra en Ucrania agravaron la crítica situación preexistente. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) pronosticó que el crecimiento de Argentina será del 4,4% este año, pero bajará a un rango del 0,5% en 2023 y subirá levemente al 1,8% en 2024. Además, indicó que la inflación, que en 2022 rondará el 100%, será del 83% el año próximo y del 60% el siguiente. Mientras, la pobreza alcanza al 36,5%, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en tanto que la tasa de desempleo llega al 6,9%.

Luchas internas

Las dudas y los desacuerdos alcanzan al Frente de Todos. Si bien la poderosa Central General del Trabajo (CGT) calificó en un comunicado de “vergonzoso” el veredicto que condenó a Cristina, hubo silencio sobre la decisión de la Vicepresidenta de no ser candidata en 2023.

Por su parte, Alberto Fernández ha dicho que desea ir por la reelección, posibilidad que hasta ahora había sido rechazada tajantemente por la plana mayor del Frente de Todos y, principalmente, por Cristina Fernández; el líder de la Cámpora y diputado Máximo Kirchner; y el ministro de Economía Sergio Massa. La CGT tampoco le ve futuro al actual Jefe de Estado para 2023 y un sector respalda a Massa para una eventual candidatura.

Otros dirigentes apoyan a Juan Manzur, jefe de gabinete y desde el sector cristinista aparece el nombre del Ministro del Interior, Eduardo de Pedro.

Sin embargo, y pese a su revés judicial en el caso Vialidad, la consultora Zubán Córdoba señaló en un reciente estudio que la actual carrera electoral la lidera en estos momentos Cristina Fernández, quien cuenta con un 29,3% de las intenciones de votos para 2023.

Expertos sostienen que la sentencia será apelada primero a la Cámara Federal, después a la Cámara de Casación y, finalmente, a la Corte Suprema. Todo este trámite puede llevar entre cinco y seis años o más. La posibilidad de que Cristina sea detenida por este fallo es inexistente por el fuero que protege a la Vicepresidenta, por el cual no puede ser privada de su libertad mientras ejerza el cargo. “Es probable que ella, si no se presenta de candidata a la Presidencia, lo haga a la senaduría bonaerense -aun saliendo segundo el peronismo en la provincia obtiene la banca- con lo cual tendría fuero hasta el 10 de diciembre de 2029”, explica Rosendo Fraga, director del centro de estudios Nueva Mayoría.

“Que la hayan encontrado culpable por el caso de Obras Públicas no va a afectar la posible opción electoral de ella o del Frente de Todos. El panorama electoral en cuanto a apoyo seguirá siendo básicamente el mismo”, dice el analista porteño Carlos Fara.

“En un país tan polarizado con kirchneristas y anti kirchneristas, y macristas y anti macristas, esta sentencia no cambia el termómetro social ni tampoco la coyuntura general”, añade el consultor y politólogo boanerense Carlos Germano.

Pero si en el oficialismo el embrollo es enorme, en la oposición los vientos también están agitados y no se vislumbra aún un atisbo de unidad.

Son varias las figuras que asoman como presidenciables en Juntos por el Cambio, la coalición de centroderecha que llegó en 2015 al gobierno de la mano de Mauricio Macri,  y que aspira a volver a la Casa Rosada. Y pese a los llamados a la unidad en pos del objetivo común de derrotar al kirchnerismo, los ataques mutuos entre sus dirigentes han sido frecuentes y se han hecho públicos.

Dentro de ese contexto de dispersión general, para la encuestadora CIGP el posible candidato más votado es Mauricio Macri, con 33,15%. Lo siguen Patricia Bullrich (ex ministra de seguridad y actual presidenta de Propuesta Republicana, PRO), con 29,78%; y Horacio Larreta, jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 19,66%.

Macri, según sostienen los politólogos,  quiere ser candidato y mantendrá su reserva hasta mayo, cuando defina si se presenta o no. “A Macri le sucede lo mismo que a Cristina Fernández. Muy buen piso electoral y muy mal techo”, manifiesta Germano.

Fara añade que tampoco se sabe cuál será el plan económico de Juntos por el Cambio, que será una de las variables que defina la elección. “Hay que tener en cuenta que perdió el poder en 2019 básicamente por el tema económico”, enfatiza.

Mientras, la coalición La Libertad Avanza, de Javier Milei, sigue creciendo desde una postura antipolítica y de rechazo a lo establecido, convirtiéndose de a poco en un tercer actor en la carrera  presidencial.

Lo evidente es que, tal como ha venido sucediendo en las últimas décadas, Argentina enfrentará un año electoral en medio de un clima de polarización, inestabilidad y dura crisis económica.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
Publicidad

Tendencias