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Bernardo Larraín Matte aterriza en la Sofofa con un abultado programa y escoltado por tres consejeros del círculo de hierro de Von Mühlenbrock Ayer fue proclamado por unanimidad como el nuevo líder del gremio

Bernardo Larraín Matte aterriza en la Sofofa con un abultado programa y escoltado por tres consejeros del círculo de hierro de Von Mühlenbrock

Luisa Navea
Por : Luisa Navea Periodista El Mostrador Mercados
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El actual timonel de la industria busca fortalecer el poder de convocatoria del gremio, llamando a participar a los distintos actores de la sociedad, y convertirlo en un organismo que dé cátedra en materia de estándares éticos y buenas prácticas. Además, rescata la idea de algunos gremios regionales para que se transforme en un detector de cuellos de botella de la inversión por región, al tiempo que pone en tabla, para que se trate como preocupación nacional, el tema de La Araucanía. En un guiño a las medianas empresas regionales, apoya construir una “Red de Mentores” para levantar al sector. Mientras que en materia de políticas públicas busca la simplificación regulatoria, a través de la construcción de una Agencia de Evaluación de Impacto Regulatorio. (Actualizada)


Importantes cambios en la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) realizará Bernardo Larraín Matte, en calidad de nuevo timonel de la industria, una vez que cruce la puerta del edificio de Avenida Andrés Bello.

En una señal de unidad, Matte incorporó a su cúpula directiva a tres consejeros del círculo de hierro de Hermann von Mühlenbrock. Se trata de la consejera Carmen Roman, su ex generalísimo Fernán Gazmuri y su ex rival Rodrigo Álvarez (AB Chile). Ellos forman parte de la nueva directiva liderada por Bernardo Larraín y sus vicepresidentes Janet Awad (Sodexo) y Gonzalo Said (Andina). Además de los consejeros gremiales regionales Jorge Lagos (Malleco y Cautín), Daniel Mass (Coquimbo), Santiago Muzzo (Asipla) y los consejeros electivos Patricio Jottar (CCU) y Alfonso Swett (Forus).

Sus principales focos apuntan a convertir al gremio de la industria en un referente de opinión, al confluir en él los distintos actores de la sociedad, y con elevados estándares éticos.

En su programa, Larraín Matte quiere potenciar el poder de convocatoria de la Sofofa al convertirlo en un lugar de conversación real con líderes de opinión de los diversos sectores de la sociedad: trabajadores, emprendedores, políticos, académicos, filántropos, científicos y jóvenes. Una iniciativa que está en línea con lo que actualmente realiza su par, el presidente de la CPC, Alfredo Moreno, a través de las últimas cumbres entre importantes empresarios, actores sociales y emprendedores e innovadores.

Además, busca hacer del gremio industrial un lugar de referencia en materia de estándares éticos y las mejores prácticas empresariales. Ello no solo a través de la autorregulación en mejores prácticas de gobiernos corporativos o de acordar alianzas entre la Sofofa y las universidades y la formación de buenas prácticas, sino también por medio de la constitución de mesas de directores y gerentes para compartir experiencias.

En su programa atenderá asimismo las preocupaciones de los gremios regionales y sectoriales, que se centran tanto en la relación de las empresas con el Estado y sus regulaciones como en la relación de las empresas regionales, pequeñas y medianas con las grandes compañías nacionales. Pero, por otra parte, pondrá en tabla algunas temáticas para que sean abordadas como un desafío nacional, como por ejemplo el terrorismo en La Araucanía, la alicaída producción industrial, la paralización de los proyectos mineros, la paralización de la inversión en la industria del salmón, las restricciones y cuellos de botella logísticos en la cadena entre centros de producción y puertos, las mayores exigencias ambientales de los mercados y de las regulaciones y la implementación de nuevas normativas reguladoras, entre las que figura el impuesto a las emisiones y el etiquetado.

En su sentido más pragmático, en el programa rescata algunas ideas de los gremios regionales para identificar los proyectos prioritarios público-privados por cada región. Así como crear un observatorio de cuellos de botella regionales que dificulten la inversión y el encadenamiento productivo con grandes empresas, junto con la construcción de un Centro de Gobierno Corporativo y una Red de Mentores para apoyar a la mediana empresa regional.

Larraín Matte tiene igualmente planes para promover buenas políticas públicas, enfocándose en la simplificación regulatoria. Para ello propone discutir la construcción de una Agencia de Evaluación de Impacto Regulatorio
Todos estos lineamientos del programa con el que aterriza en la Sofofa los comenzó a construir desde el año pasado, con la ayuda del denominado Grupo de los 5: Gonzalo Said (Embotelladora Andina), Richard von Appen (Ultramar), Alfonso Swett (Forus) y Juan Manuel Santa Cruz (Lipigas) y culminó con la ayuda de Patricio Jottar (CCU), el abogado y gerente de División de Desarrollo Sustentable de Colbún, Juan Pablo Schaeffer, y el periodista Emilio Sanfuentes, de la agencia Corpo, la cual podría desplazar a Nexos en las comunicaciones de la industria.

Aprendiendo de los errores de la elección pasada, en la que estuvo a punto de quedar fuera de la Sofofa como consejero electivo tras apoyar la candidatura del ex controlador de Sonda, Andrés Navarro, contra Von Mühlenbrock, Larraín Matte se lanzó a la carrera por la Sofofa sin el apoyo de la actual directiva y con el pasivo de estar vinculado a la familia que protagonizó el peor escándalo de colusión en el país. Haciéndose cargo de ello, el heredero de los Matte decidió despejar cualquier duda, renunció a la presidencia de Colbún, y se lanzó a la conquista de votos y voluntades, escuchando lo requerimientos de los gremios, los que prometió implementar en el gremio que hoy encabeza.

“Bernardo viene trabajando su programa desde el 2016”, cuenta una fuente de su círculo más cercano. Su contenido fue presentando en diferentes foros, en los cuales expuso, de manera de ir testeando su receptividad. “En función de eso le fue dando estructura. Luego incorporó la visión y aportes del Grupo de los 5, sus conversaciones con los consejeros y candidatos a consejeros e incluyó las necesidades presentadas por los gremios regionales”, precisa un conocedor del programa.

Sin embargo, el camino para recoger tales inquietudes de la industria y conquistar la confianza de las empresas socias no le fue tarea fácil. Al inicio de su campaña, Bernardo Larraín Matte tuvo que enfrentar la crítica del controlador de Carozzi, Gonzalo Bofill, quien en entrevista con La Tercera dijo que no consideraba prudente que el empresariado eligiera como máximo directivo “a quien estuvo en el directorio de una empresa involucrada recientemente en un caso de colusión”.

El dueño de la empresa de alimentos despertó así las dudas entre los consejeros y permitió posicionar al candidato de los históricos, Rodrigo Álvarez. Pero también activó el cierre de filas del controlador de Quiñenco, Andrónico Luksic, el ex presidente de la CPC, Rafael Guilisati, y el ex timonel de la Sofofa, Juan Claro, en torno a la figura de Matte. Tensión que se trasladó hasta el propio gremio de Alimentos y Bebidas que presidía Álvarez y que forzó la salida del ex diputado UDI de la contienda electoral, luego que le dieran su respaldo a Larraín Matte.

La elección continuó con los intentos del ex presidente de la Sofofa, Pedro Lizana, de levantar una candidatura paralela mientras Bernardo Larraín realizaba sus últimos encuentros con los representantes de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Puerto Montt y el presidente de Salmón Chile, Felipe Sandoval, además de los representantes de otras cinco compañías del rubro.

Pero luego vendría la denuncia del espionaje del presidente de la Sofofa, Hermann von Mühlenbrock, y su vicepresidente José Juan Llugany, que enrareció aún más el ambiente electoral, pero que permitió unificar posiciones del empresariado en torno al único candidato, Bernardo Larraín Matte.

En pro de la unidad, fraccionada por esta elección, el ex presidente de Colbún invitó a Álvarez a formar parte de la cúpula directiva, con la idea de mantener lo sembrado por Von Mühlenbrock y complementar ideas similares de campaña que había recogido el ex diputado UDI.

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