Argentina está camino a superar su objetivo de déficit fiscal para 2017 después de que el gobierno del presidente Mauricio Macri frenara agresivamente el gasto del tercer trimestre.
El déficit primario acumulado durante los primeros nueve meses del año ascendió a 2,2 por ciento del Producto Interno Bruto, un punto porcentual por debajo del objetivo de 3,2 por ciento establecido para el tercer trimestre, dijo el martes el Ministerio del Hacienda. Comparado con el año anterior, el déficit se redujo 15 por ciento en septiembre a 31.400 millones de pesos (US$1.800 millones).
Macri se dio a sí mismo el margen para mantener el gasto a principios de año con miras a las elecciones de mitad de período en las que su alianza logró elevar la representación en el Congreso y mientras impulsaba su legislación favorable a las empresas. El gobierno cambió el rumbo en agosto y comenzó a reducir el gasto en términos reales, dijo Federico Muñoz, director de la consultora Federico Muñoz y Asociados, con sede en Buenos Aires.
"Lo que estamos empezando a ver es un cambio de estrategia del gobierno, que incluso antes de las elecciones parece haber abandonado el gradualismo", dijo Muñoz por teléfono desde Buenos Aires. "Es muy probable que terminemos con un déficit bastante inferior al objetivo de este año". En consultor proyecta un déficit para finales de año de 4 por ciento o menos, en comparación con el objetivo de 4,2 por ciento.
El jefe de asesores del Ministerio de Hacienda, Guido Sandleris, dijo que el resultado de las elecciones no llevaría al gobierno a acelerar el ritmo de la reducción del déficit, ya que eso ya es una prioridad.
El ministro de Hacienda, Rodrigo Peña, dijo que el crecimiento de los ingresos en 2017 excederá el crecimiento del gasto por primera vez desde 2004. El crecimiento de los ingresos aumentó 27 por ciento el mes pasado.
