Publicidad
La Sofofa toma palco en elección de nuevo presidente CPC a la espera que se defina el escenario

La Sofofa toma palco en elección de nuevo presidente CPC a la espera que se defina el escenario

Natalia Saavedra Morales
Por : Natalia Saavedra Morales Editora periodística El Mostrador Mercados
Ver Más

El gremio estaría por tomar algo de distancia en la elección y, aunque le interesa quien asuma en la entidad, por ahora esperarán que la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) queme sus propios cartuchos, para así concentrarse en continuar con su agenda pública en 2018. Los gremios más tradicionales están por volver a ejercer un liderazgo de corte más conservador.


Se han tirado muchos nombres a la ruleta, pero ninguno generaría consenso ampliado. Esto, en relación con la elección de presidente que debe hacer la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) para reemplazar al nombrado ministro de Desarrollo Social y Familia, Alfredo Moreno.

Los plazos aún tienen holgura, pero eso no resta que al interior de las diferentes ramas gremiales se estén sacando todo tipo de cálculos: que podría ser de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), ya que nunca ha tenido un presidente; que mejor provenga de un gremio tradicional, como la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA); o que la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) se haga cargo de la batuta; o por qué no escoger a una mujer, han dicho los más avezados.

Hasta ahora la incertidumbre reina, aunque hay algunos puntos sobre la mesa. Lo primero es que los estatutos abren la opción de dos caminos que deben ser definidos por el Consejo General de le entidad, representado por su Comité Ejecutivo: que el cargo se extienda o no por un año más. Esto, debido a que el tiempo que le restaba a Moreno parece estrecho para todos los sectores.

“Pensar que alguien dedique tiempo por solo un año al cargo es desgastante para la institución y para la persona. Creo que hay consenso en que tiene que ser por dos años”, comenta un dirigente.

Las definiciones deberían realizarse en marzo, cuando se reintegren varios dirigentes que están de vacaciones.

Lo cierto es que hasta ahora los nombres que han circulado como posibles candidatos estarían “quemados”. Ni José Juan Llugany, ni Joaquín Villarino, ni Manuel Melero serían nombres que estén puestos seriamente sobre la mesa. “Hasta ahora es pura especulación y ha sido un poco salir a quemar candidatos”, opina una fuente allegada.

Y si en un primer momento varios gremios estuvieron por que el futuro candidato viniera de la Sofofa, con el fin de que el elegido tuviera un perfil similar al de Bernardo Larraín, el gremio habría apostado por una actitud diferente: tomar palco de las elecciones.

La apuesta del gremio sería no quemar a nadie hasta último minuto y que por ahora los candidatos provengan de otros sectores. Hay quienes van más allá y aseguran que la decisión definitiva será no presentar candidato y dejar que las cosas se zanjen al interior de la CPC.

Es una alternativa que ya deslizó el timonel de la Sofofa, Bernardo Larraín, al señalar que apoyarán al mejor candidato, y descartó asumir –como se planteó muy tempranamente– la presidencia de la CPC, dejando en claro que la concentración de su ejercicio está en la agenda de la Sofofa.

“Hemos armado un gran equipo, los consejeros están muy comprometidos con esta causa, y soy un firme creyente en el foco. Siento mucha responsabilidad, motivación y entusiasmo con este proyecto. La CPC es una institución relevante que requiere el mismo foco y dedicación, y por lo tanto descarto mi disponibilidad para ejercer su presidencia», sostuvo la semana pasada.

Esa concentración de la que habla Larraín Matte sería también parte de las razones para no desgastarse debatiendo por quién de la Sofofa podría saltar a la CPC. “Es decir que la idea interna es que se arreglen mejor entre ellos, y la Sofofa se concentre en seguir profundizando su agenda”, comenta un dirigente gremial.

Eso, pese a que en un minuto se pensó que lo mejor sería que el candidato proviniera de la Sofofa, idea que con los días se fue moderando.

¿Old o new school?

Lo cierto es que más allá de los nombres que han circulado, la elección de presidente para la CPC trae consigo un debate de ideas o, mejor dicho, de escuelas. Por un lado, las ramas gremiales que se habían “encantado” con el discurso de Moreno, y que destacan de entre sus virtudes el gran nivel de convocatoria empresarial que tuvo su mandato.

“Recordemos que poco después de que asumió, convocó a esta especie de cónclave en las Majadas de Pirque, adonde llegaron muchos empresarios y donde se notó que él llegaba a un nivel que antes no había llegado otro presidente de la CPC”, dice un allegado al gremialismo.

Hay un sector que apoyaría que ese perfil se mantenga en la nueva presidencia de la CPC: un representante de las nuevas generaciones, empresario y no ejecutivo, que tenga la capacidad, además, de tener alta convocatoria y de conversar de tú a tú con el Presidente electo Sebastián Piñera.

El mismo grupo destaca lo que sucedió mientras Moreno ejerció el cargo, especialmente en materia de la cercanía que logró con el mundo del emprendimiento y con una generación ciertamente más joven que la que estaba habituada a debatir en la CPC. “Eso no deberíamos perderlo”, asegura un dirigente.

También hay voces que indican que produjo cierta desazón la salida de Moreno de la presidencia y su consecuente arribo al Gobierno. “Había un grupo que pensó que estaba garantizado que terminaría su período”, dice una fuente. Ese segmento consideraría, entonces, que sería sensato que ahora las ramas más tradicionales asuman la presidencia de la Sofofa: que provenga de la SNA o de la CChC, también de la CNC, son parte de su mirada.

Ese grupo apuesta por un mandato de bajo perfil, y que sea manejado por los sectores más tradicionales. No ven problemas en que un dirigente de “más canas” asuma el cargo, aunque los disidentes de esta propuesta consideran que ello haría que la agenda del gremio pierda sintonía con los avances realizados por Moreno.

Además, al grupo más reformista le parece que ni Melero ni Fernando Echeverría, entre otros nombres que han sonado, tienen el nivel de contactos políticos que se requiere para estar al frente del gremio en esta pasada. Los nombres que más sentido le hacían a este segmento eran los de Alfonso Swett hijo o Gonzalo Said, “o alguien de ese perfil”, comenta una fuente. Pero eso también chocaba con la idea de no restarle fuerza a las tareas de la Sofofa.

“Es un debate entre la vieja y la nueva escuela, en el que los gremios tradicionales van a querer inclinar, en su derecho, la balanza”, añade un conocedor.

Con todo, marzo parece un mes clave para afinar una lista corta realista. Como anécdota, al interior de los gremios dicen que por ahora el negociador histórico de posiciones está en el sur de vacaciones, en referencia a Rafael Guilisasti. “Seguro que va llegar a poner orden, porque es un excelente mediador”, afirma un cercano.

 

 

Publicidad

Tendencias