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El anuncio fue retirado además en medio de críticas transversales, principalmente de senadores de oposición, respecto del impacto de dicha reducción en las políticas que impulsa Hacienda, específicamente por la rebaja de presupuestos de programas como los del Sename y Educación.
Ayer todo se volvió confuso cuando se reveló que el lunes por la noche el Decreto 651 había sido retirado de la Contraloría General de la República por parte del Ministerio de Hacienda. Se trata de un documento de 164 páginas que contenía el diseño de la reducción de presupuesto decidida por el actual Gobierno.
El documento detallaba el diseño del plan de reducción y reasignación de recursos para los distintos servicios que componen el Presupuesto 2018; esto, por un monto de US$ 1.100 millones. Sin embargo, ayer, el documento fue retirado de Contraloría, según anunció la Dirección de Presupuestos (Dipres).
En la declaración, la Dipres advierte que la idea del Ejecutivo es modificar el documento, que estaba en proceso de toma de razón por parte del órgano contralor, para “reasignar recursos desde otros subtítulos presupuestarios, pero manteniendo el monto global de la contención de gasto en la misma cifra”.
El anuncio fue retirado además en medio de críticas transversales, principalmente de senadores de oposición, respecto del impacto de dicha reducción en las políticas que impulsa Hacienda, específicamente por la rebaja de presupuestos de programas como los del Sename y Educación.
El diputado del PS Manuel Monsalve, en conversación con Radio Bío Bío, señaló que la medida significa que “el Presidente de la República le ha quitado el piso a su ministro de Hacienda”. Desde el ministerio liderado por Felipe Larraín declaran que esto por ningún motivo, ya que el decreto no ha sido descartado, sino más bien suspendido para hacerle modificaciones.
Pero ayer, al terminar la tarde, la Dirección de Presupuestos, luego de la avalancha de dudas que generó la decisión, aclaró los alcances de la medida, asegurando que no se trata de reducir el ajuste fiscal sino de reacomodos respecto a dónde se aplican los recortes.
«La decisión de retirar este documento se concretó luego de varias conversaciones con ministerios y servicios respectivos que solicitaron reasignar recursos desde otros subtítulos presupuestarios. Además, se recibieron observaciones de Contraloría. (…). Insistimos en la necesidad de concretar una contención de gastos que alcanza un total de US$ 1.100 millones anuales. Esto significa, que de todas formas se reingresará a Contraloría el decreto definitivo con los ajustes necesarios y que permitirán, entre otras cosas, el financiamiento de iniciativas emblemáticas del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera», dijeron.
Dentro de esos proyectos se cuenta el acceso universal a salas cunas, disminuir las listas de espera en salud y financiar en parte el déficit operacional de los hospitales; contribuir al financiamiento de la gratuidad otorgada a los estudiantes de centros de formación técnica e institutos profesionales; financiar el aumento en un 25% de la subvención de niños atendidos por organismos colaboradores —residenciales— del Sename y financiar la nueva regulación migratoria, la que incluye la creación de un Servicio Nacional de Migraciones.
La Dipres afirmó que el recorte «no afectará gastos esenciales ni proyectos de profundo contenido social», ni tampoco «el funcionamiento de los servicios y programas que promueve el Gobierno».
