MERCADOS
La medida se traduce en que los despachos de maíz, trigo y carne de res serán gravados nuevamente luego de que Macri eliminara impuestos cuando asumió el cargo en diciembre de 2015. Argentina es el tercer mayor exportador de maíz del mundo y el séptimo de trigo.
Argentina aplicará un nuevo impuesto a las exportaciones de cultivos, en momentos en que el presidente Mauricio Macri recurre a los agricultores para resolver una crisis marcada por el aumento de la inflación y las tasas de interés y una moneda que se debilita.
Todas las exportaciones primarias tendrán un arancel de cuatro pesos por dólar, lo que significa que los pagos dependerán de los precios de los productos básicos y la tasa cambiaria. La medida significa un cambio para Macri, que anteriormente había derogado impuestos implementados por gobiernos anteriores que tenían indignados a los productores del principal exportador mundial de harina y aceite de soja.
«Sabemos que es un impuesto realmente malo que va en contra de lo que queremos estimular, que es más exportaciones», admitió el presidente en un discurso televisado. «Pero les pido que entiendan: es una emergencia y necesitamos su apoyo».
La medida se traduce en que los despachos de maíz, trigo y carne de res serán gravados nuevamente luego de que Macri eliminara impuestos cuando asumió el cargo en diciembre de 2015. Argentina es el tercer mayor exportador de maíz del mundo y el séptimo de trigo.
Para el principal cultivo comercial de Argentina, la soja y sus subproductos, el anuncio significa un aumento de la tasa impositiva.
Ello pese a la reducción del impuesto a la exportación existente, de 26% a 18% en el caso de los granos de soja y del 23% al mismo 18% para la harina y el aceite. Ahora a esto se sumará el impuesto de cuatro pesos por dólar, que regirá hasta el fin de 2020. A los precios y tipo de cambio actual, eso representaría una tasa total del 29%, comentó a través de mensaje de texto Gustavo Idigoras, titular de la cámara industrial Ciara-Cec.
A diferencia del enfoque gradual que contemplaba implementar originalmente para reducir el déficit presupuestario, Macri apunta ahora a dejar atrás las cifras rojas el próximo año luego de que el desplome del peso dejara entrever que los inversores quieren más disciplina fiscal.
Los despachos de cultivos del país dejaron ingresos por US$21.400 millones en 2017, según Ciara-Cec. Entre los miembros de la organización figuran los denominados gigantes ABCD del comercio agrícola. Después de una sequía terrible sufrida este año, se espera que las exportaciones repunten en 2019 y se pronostican cifras récord de cultivos de maíz y trigo.
Si bien varios agricultores no estarán contentos con la noticia, puede que algunos la acepten a regañadientes y la vean como algo temporal para sacar al país y a Macri de la crisis. El peso ha caído 29% en el último mes en medio de la creciente preocupación de los inversores por las arcas fiscales.
«Somos el trampolín que usa el gobierno cuando necesita ayuda», aseguró Pedro Vigneau, que cultiva 1.700 hectáreas de cultivos y pastizales en Bolívar. «Quiero ver el país de nuevo en pie, pero Macri debe asegurarse de que las medidas de emergencia no permanezcan en su lugar para siempre «.
El plan de equilibrio fiscal del presidente argentino prevé una reducción drástica de su Gobierno a menos de la mitad, y medidas drásticas como un impuesto a las exportaciones. Macri anunció este lunes (3.09.2018) la reducción a menos de la mitad del gabinete de ministros, el aumento de los aranceles a la exportación y medidas de contención para los sectores más pobres para superar la crisis que atraviesa el país sudamericano.
Con un semblante muy serio y circunspecto, aseguró que con ello intenta dar a los mercados una señal clara de control del gasto para detener el déficit y la inflación, acelerada en los últimos días por una depreciación desmedida del peso con respecto al dólar, además de desterrar para siempre la corrupción. El presidente hizo este anuncio a las 9.45 hora local (12.45 GMT) en un mensaje televisado a la nación, grabado previamente en la Casa Rosada en dos sesiones, poco antes de que el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anuncie los «detalles técnicos» de las medidas económicas que mañana presentará en Washington al Fondo Monetario Internacional (FMI) para un reajuste del acuerdo, que estará «listo en días», según Macri.
El presidente, que reconoció haber hecho gala de demasiado optimismo en sus previsiones, justificó la dramática reducción de su gabinete «a menos de la mitad» por la gravedad del momento, que a su juicio exige «compactar» su equipo de gobierno más directo «para dar la respuesta más focalizada en la agenda que viene».
