Nuevamente un duro golpe para el sector salmón.
Ayer los papeles se de las salmoneras se desplomaron en bolsa luego de confirmarse el retorno del virus ISA a cultivos nacionales.
El índice que mide el desempeño del sector se derrumbó, cayendo 6 % en un día en que el IPSA brilló, cerrando con ganancias de más de 1 %.
El virus estuvo poco más de dos años sin brotar o ser detectado en cultivos nacionales. Su presencia fue confirmada en un centro ubicado en las cercanías de la isla Garrao, en la región de Aysén, a la Pesquera Los Fiordos, controlada por Agrosuper.
La industria había experimentado una importante recuperación desde el complejo período que vivió pocos años atrás debido a la crisis del virus ISA, que llevó a gran parte de sus empresas al borde de la quiebra y a otras simplemente les implicó desaparecer.
En el primer trimestre de este año los papeles de las empresas del sector se habían recuperado, con el índice terminando los primeros tres meses del año con ganancias de cerca de 23 %, casi recuperando por completo el 25 % que cayó en 2012.
En los primeros tres meses del año los precios se recuperaban y con ello los márgenes. En febrero LarrainVial subió su recomendación de Camanchaca a "Mantener" y en el informe dijo que los precios del salmón habían tocado fondo el el último trimestre de 2012.
La industria estaba viendo mejores flujos de caja y estaba en conversaciones con los bancos para reestructura deudas aun vigentes de la crisis de 2010. Además, el sector se está consolidando y eso es visto como positivo por los analistas y los inversores.
Pero todo comenzó a cambiar el primero de abril cuando las acciones de Invermar, las de mejor desempeño en el primer trimestre, cayeron 14 % luego de recibir una oferta que valuó a la empresa a la mitad de su valor bursátil.
Como en el pasado, los bancos más expuestos son Banco de Chile, BCI, Corpbanca, Rabobank, BancoEstado y Santander.
Esta sería la tercera negociación con la banca, ya que después del complejo refinanciamiento de 2008 y 2009, las entidades financieras volvieron a renegociarles sus deudas a fines de 2010. En esa ocasión la banca aceptó renegociar deudas que, para un total de casi 40 empresas, sumaban más de US$ 2.000 millones.
Un alto ejecutivo de uno de los bancos comprometidos dice que están mejor preparados que hace dos años, pero si la crisis se expande como sucedió la vez anterior, habrán pérdidas relevantes para la banca.
