En momentos en que gigantes farmacéuticos como Pfizer Inc., AstraZeneca Plc y Norvartis AG se apresuran a fusionarse, los inversores en bonos recompensan a la chilena CFR Pharmaceuticals SA por retirarse de la que habría sido su mayor adquisición.
Hoy los papales de CFR están entre los dos que más suben en bolsa hoy y acumulan ganancias de cerca de 20% desde que anunciaron que retiraban la oferta de 12.800 millones de rands (US$1.200 millones) por la sudafricana Adcock Ingram Holdings Ltd. al no contar con suficiente apoyo por parte de los accionistas. De acuerdo a Bloomberg, los US$300 millones de pagares de CFR con vencimiento en 2022 han retornado 8,2 por ciento desde la misma fecha. La oferta era
La decisión de abandonar la transacción luego de buscar durante 10 meses el control de Adcock ha aliviado el temor de que CFR, que tiene sede en Santiago, incrementara su endeudamiento para financiar la adquisición y desencadenara reducciones de calificación. La fusión se frustra en momentos en que las compañías farmacéuticas del mundo se encuentran en una ola de adquisiciones, en cuyo marco Pfizer, que tiene sede en Nueva York, hizo la semana pasada una oferta sin precedentes de US$106.000 millones por AstraZeneca.
“Es un muy buen indicio que CFR se retirara de la transacción”, dijo Pedro Pablo Larraín, un administrador de dinero de Sartor Investments, en entrevista telefónica desde Santiago. “Demuestra que la compañía sólo pagará precios razonables por operaciones que sean un verdadero beneficio y la hagan más eficiente. CRF pertenece a un sector que concita mucho interés. Basta con ver las noticias sobre las fusiones en otros mercados para comprobarlo”.
Los bonos de las pares globales de CFR han retornado 2,2 por ciento desde que la compañía suspendió la adquisición, según datos de Bank of America Corp.
Amenaza de Fitch
CFR habría tenido que obtener por lo menos US$750 millones en nuevo capital para evitar una reducción de su calificación BBB-, dijo Fitch Ratings en julio. La propuesta de efectivo y acciones debía contar con la aprobación del 75 por ciento de los inversores para concretarse, lo que se hizo imposible cuando Bidvest Group Ltd., que tiene sede en Johannesburgo, acumuló una participación de 34,5 por ciento en la empresa sudafricana de productos hospitalarios para oponerse a la transacción. The Public Investment Corp., que administra los fondos de pensiones de los empleados públicos de Sudáfrica y es la segunda mayor accionista de Adcock, también se opuso al acuerdo. La propuesta de CFR no tenía perspectiva alguna de contar con la aprobación necesaria del 75 por ciento de los accionistas, dijeron Adcock y CFR en una declaración conjunta del 7 de febrero.
“En cuanto anunciaron que abandonaban la operación, la presión que experimentaba CFR desapareció”, dijo Rina Jarufe, una analista de Fitch, en entrevista telefónica desde Santiago. “Volveremos a analizar la compañía en cuanto anuncie otra gran adquisición”.