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Polémica decisión de la ANFP: restricción de ascenso directo en la Segunda División Profesional generó indignación en el mundo del fútbol nacional DEPORTES Créditos: Aton

Polémica decisión de la ANFP: restricción de ascenso directo en la Segunda División Profesional generó indignación en el mundo del fútbol nacional

Esta no es la primera vez en que se ve envuelta la ANFP en este tipo de exclusión a los equipos de la Segunda División Profesional. El Tribunal de Defensa de la Libre Competencia los sancionó en junio del año pasado con una multa cercana a los 4 millones de dólares, por establecer una cuota millonaria a los equipos que ascendían de dicha categoría a la Primera B.


La decisión tomada por parte del Consejo de Presidentes de la ANFP el cual integran los representantes de la Primera A y Primera B, determinó que no habrá cupo de ascenso directo de la Segunda División Profesional a la Primera B. Esto generó indignación en diferentes planos del fútbol chileno ante la insólita medida que castiga de forma injustificada los merecimientos deportivos, establecidos dentro de los márgenes del ejercicio de esta disciplina a nivel mundial.

La ANFP estableció que el ascenso se dará solo si el merecedor de la Segunda División Profesional vence en un partido de definición al representante de la Primera B. Esto ha generado diversas reacciones, el cual traspasó el mundo del fútbol.

Una de las críticas más contundentes fue la de Arturo Vidal, propietario de uno de los equipos de la categoría, Rodelindo Román. El King en primera instancia agradeció a los equipos que votaron en favor de que los integrantes de aquella división puedan recibir dineros y el ascenso directo (Universidad Católica, Palestino, La Serena, San Marcos, Lautaro de Buin y San Marcos de Arica), para luego enviar un duro mensaje a los que se opusieron a esta propuesta.

“Gracias por el apoyo a estas instituciones que entienden que hay que buscar condiciones justas para todos los clubes profesionales. El resto, asegurados, cobardes, preocupados de sus bolsillos y dañando a los demás, una vergüenza”, dijo Vidal.


Por su parte, el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, defendió los intereses de uno de los clubes afectados, Deportes Recoleta, manifestando en su cuenta de Twitter que “cómo es posible que la ANFP acapare todos los recursos del canal de TV, discriminando a la Segunda División, y ahora además pretenda darle ‘medio cupo’ para optar a la primera B. Quieren apoderarse del fútbol y eliminar posibilidad de competir! #FútbolParaTodxs”.


Respecto a lo determinado, el Sindicato de Futbolistas Profesionales (Sifup), también ocupó las redes sociales para hacer un llamado a sus representantes. “Debido a las lamentables decisiones adoptadas por el Consejo de Presidentes y en virtud a lo que establecen nuestros estatutos, citaremos a Asamblea Extraordinaria el próximo lunes, donde delegados y capitanes decidirán los pasos a seguir”.


Previo a esta situación, mientras se estudiaba esta polémica propuesta, los clubes de la Segunda División Profesional firmaron un documento expresando que “no existe equidad deportiva alguna en la determinación que está tomando de forma unilateral la ANFP y en particular su Consejo de Presidentes, por lo que los clubes firmantes que integran la Segunda División Profesional informan que no participarán de ningún torneo que no contemple, a lo menos, un cupo de ascenso directo a Primera División B junto con una cantidad equivalente de cupos de descenso, corrigiéndose la disparidad que hoy existe y se evalúen de forma urgente las condiciones económicas y deportivas con las que se está desarrollando el fútbol en nuestra división”. 

Además agregaron que “no podemos aceptar que mediante una decisión unilateral se nos quite el cupo de ascenso directo a la Primera División B y se obligue al campeón del torneo de Segunda División a jugar un partido de definición con el último del torneo ya señalado (…) Lamentamos profundamente que por estos actos se vea amenazado la representación de miles de hinchas y que tornan imposible el desarrollo de nuestra profesión, pero nos encontramos a la espera de encontrar una pronta respuesta”.

Esta no es la primera vez en que se ve envuelta la ANFP en este tipo de exclusión a los equipos de la Segunda División Profesional. El Tribunal de Defensa de la Libre Competencia los sancionó en junio del año pasado con una multa cercana a los 4 millones de dólares, por establecer una cuota millonaria a los equipos que ascendían de dicha categoría a la Primera B.

En esa instancia el ente determinó que “la Cuota de Incorporación tuvo el efecto de limitar la capacidad competitiva y deportiva de los clubes que la pagaron” y que este cobro ha constituido “una barrera artificial que obstaculiza el ingreso al mercado o, en caso que se logre ingresar, entorpece el desempeño competitivo del entrante”.

En aquella ocasión la sanción se argumentó con que “el fútbol profesional chileno, cuyo único organizador es la ANFP, es una actividad económica y que no existen mercados que puedan eximirse de cumplir con las leyes de libre competencia”.

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