«Fernandinho Beira-Mar», uno de los mayores capos del país carioca, acumula casi 320 años de prisión en condenas por delitos de tráfico de drogas, formación criminal, lavado de dinero, contrabando y homicidio. La organización ilícita de narcotraficantes estaría ligada a conexiones en Colombia y Paraguay, donde además se comercializaban productos como cigarrillos, servicios de moto-taxi y hasta abastecimiento de agua.