El arresto de Augusto Pinochet en Londres fue todo un hito de relevancia internacional en materia de derechos humanos. El dictador permaneció entre el 16 de octubre de 1998 y el 2 de marzo del 2000 en la capital británica, gracias a la orden de detención emitida por parte del juez de la Audiencia Nacional de España, Baltasar Garzón, por presunta implicación en los delitos de genocidio, terrorismo internacional, torturas y desaparición de personas. En este video, un recuento de uno de los eventos históricos que puso a prueba la transición chilena.