Se trata de una especie que no ha evolucionado prácticamente desde hace 150 millones de años y presenta cualidades únicas, como una vejiga gaseosa que funciona también como pulmón, una mandíbula prolongada similar a una trompa equipada con varias filas de dientes afilados y sus escamas brillantes en forma de rombo.
Científicos costarricenses lograron reproducir por primera vez en un laboratorio al extraño pez gaspar, el cual es considerado como un fósil viviente, pues su fisonomía prácticamente no ha cambiado en 150 millones de años, informó este jueves la prensa local.
El pasado fin de semana nacieron 40.000 alevines de pez gaspar en un laboratorio en el Caribe del país, como una iniciativa de la estatal Universidad Nacional, el Instituto Nacional de Pesca y Acuicultura (Incopesca) y el Ministerio de Ambiente, indicó este jueves el diario La Nación.
La técnica para reproducirlos consiste en inyectar una hormona artificial a la hembra que la induce a poner huevos en plantas de río colocadas en un estanque, los cuales luego son fecundados por los machos previamente seleccionados.
Unas 50 horas después nacen los alevines, que por dos días son alimentados por los científicos con pequeños crustáceos y luego con alimento rico en proteínas.
«Con esta técnica de cultivo de peces esperamos mejorar las poblaciones de este pez insertando nuevos individuos en diferentes ríos», explicó al diario el biólogo Álvaro Otárola, quien destacó que es la primera vez que se reproduce en laboratorio un pez nativo de Costa Rica.
La principal población de pez gaspar (atractosteus tropicus), una especie que está amenazada pero aún no se encuentra en peligro de extinción, se ubica en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Caño Negro, en la zona norte de Costa Rica.
El gaspar no ha evolucionado prácticamente desde hace 150 millones de años y presenta cualidades únicas, como una vejiga gaseosa que funciona también como pulmón, una mandíbula prolongada similar a una trompa equipada con varias filas de dientes afilados y sus escamas brillantes en forma de rombo.
Además, posee numerosos huesos en la cabeza, tiene dientes muy desarrollados, su color es verde olivo en la parte dorsal, blanco o amarillo en el vientre y presenta manchas redondas y oscuras en su dorso.
La pesca representa su principal amenaza, ya que es uno de los peces más consumidos en la zona norte, así como la alteración del medioambiente causada por el hombre y la contaminación.
Los pescadores artesanales lo prefieren por su deliciosa carne, mientras sus escamas y huesos son utilizados para confeccionar artesanías.
El pez gaspar puede llegar a medir hasta un metro de largo y habita en aguas dulces de Centroamérica y el sur de México, donde se alimenta de otros peces por ser una especie depredadora. EFE
