La presidenta, Michelle Bachelet, destacó que la reunión sirvió para fortalecer la «confianza en un cambio de la relación de Estados Unidos con América del Sur». Todos los mandatarios sudamericanos coincidieron en la necesidad de integrar a la isla a estas cumbres. El mandatario estadounidense ofreció el viernes un “nuevo comienzo” en las relaciones con la isla, afirmando que es necesario dejar atrás los agravios del pasado para afrontar los desafíos del futuro.
Los presidentes sudamericanos reiteraron este sábado al mandatario de Estados Unidos, Barack Obama, la necesidad de avanzar hacia una normalización de las relaciones con Cuba, en una reunión en Puerto España previa al comienzo de los debates de la V Cumbre las Américas.
Tras la reunión con Obama, la presidenta de Argentina, Cristina Fernández; el gobernante de Uruguay, Tabaré Vázquez, y el canciller brasileño, Celso Amorim, coincidieron en la petición que hicieron al presidente de EEUU sobre Cuba como miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Tabaré Vázquez explicó que los presidentes suramericanos coincidieron en la necesidad de integrar a Cuba a estas cumbres.
«El presidente Obama quedó en estudiar este planteamiento», dijo Vázquez a periodistas.
La cuestión cubana fue uno de los planteamientos comunes que los mandatarios de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guayana, Paraguay, Perú, Guayana, Uruguay y Venezuela hicieron a Obama en la reunión multilateral, confirmó Amorim.
Cuba es «un tema que está en la cabeza de todo el mundo», dijo el canciller, y agregó que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva «fue muy enfático en relación a que todos tienen la expectativa de que la relación con Cuba se normalice».
«El gran test era un avance en relación a Cuba. Creo que fue dado un paso pequeño en la dirección correcta. Yo creo que ahora, en vez de estar discutiendo los próximos pasos, lo que tiene que haber es un diálogo directo», agregó Amorim en una rueda de prensa.
Según Amorim, el presidente Lula dijo que «es muy difícil que haya una nueva Cumbre de las Américas y que Cuba no esté presente».
En tanto, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, destacó, por su parte, que la reunión de Unasur sirvió para fortalecer la «confianza en un cambio de la relación de Estados Unidos con América del Sur».
«En esta reunión hemos entendido que es una primera fase de la construcción de confianza en un cambio de la relación de Estados Unidos con América del Sur», dijo Bachelet, que encabezó la reunión por parte de Unasur como presidenta «pro témpore».
La presidenta argentina, Cristina Kirchner, afirmó, por otro lado, que «es momento de recuperar la confianza» y calificó de «sumamente positiva» la reunión de Obama con los líderes de Unasur.
«Hablamos muy bien, como a mí me gusta, sin estridencias, planteando cada uno su posición», agregó.
«Esperemos que ahora todas estas cosas que hemos charlado se plasmen en realidad», añadió, tras recalcar que «es una oportunidad histórica para cambiar la Historia».
En ese sentido, Vázquez calificó de «excelente» la reunión con Obama, mientras que Amorim la definió como «muy cordial, muy constructiva».
«Creo que la visión de Estados Unidos está cambiando. Aceptar que tenga que tener un diálogo con la Unasur, oyendo a cada uno, es una cosa muy nueva porque eso parte del presupuesto de que aceptan no sólo procesos de integración económica sino procesos de interlocución política», expresó.
Según Amorim, si el ambiente de la V Cumbre de las Américas es el que prevaleció en la reunión de Obama con sus homólogos suramericanos, «vamos a ver resultados positivos».
El canciller también comentó la intervención del presidente venezolano, Hugo Chávez, en la multilateral de hoy, y dijo que el mandatario «hizo una intervención muy correcta, muy basada en la esperanza y orientada para el futuro».
Agregó que Obama «respondió de la misma manera» a la intervención de Chávez, quien antes de la cita le obsequió al inquilino de la Casa Blanca un ejemplar del libro «Las venas abiertas de América Latina», del uruguayo Eduardo Galeano.
EFE
