En el país asiático también se han registrado hasta hoy 76 sismos superiores a 6 grados en la escala abierta de Richter y 5 de más de 7 grados, después del terremoto y el posterior tsunami que dejaron casi 25.000 víctimas entre muertos y desaparecidos.
Desde el terremoto de una magnitud de 9 grados en la escala de Richter del 11 de marzo, se han registrado en Japón 444 réplicas de más de 5 grados, similares al temblor que ayer se produjo en la localidad de Lorca, en el sudeste de España, y que causó la muerte de al menos ocho personas e importantes daños materiales.
En el país asiático también se han registrado hasta hoy 76 sismos superiores a 6 grados en la escala abierta de Richter y 5 de más de 7 grados, después del terremoto y el posterior tsunami que dejaron casi 25.000 víctimas entre muertos y desaparecidos.
Solo el mismo día del sismo del 11 de marzo, que sobrevino a las 14.46 horas (5.46 GMT) y que ha desencadenado la peor crisis en Japón desde la II Guerra Mundial, se contaron más de 60 réplicas.
Más de 350.000 casas resultaron destruidas o dañadas en el noreste del país por las olas que siguieron al temblor y rompieron la refrigeración de los reactores de la central nuclear de Fukushima, cuyos daños sufridos desencadenaron la grave crisis atómica que aún sigue abierta.
Japón está en una de las zonas sísmicas más activas del mundo y los terremotos de gran intensidad son relativamente frecuentes, pero no suelen causar graves daños debido a la estricta normativa en materia de construcción.
Un país con un alto riesgo de temblores telúricos como Japón, asentado en el Anillo de Fuego del Pacífico, educa desde la infancia a sus habitantes para afrontar los constantes temblores y saber qué hacer cuando se produce un sismo.
La normativa antiterremoto en Japón explica con claridad los pasos a dar: primero comprobar cómo se encuentra tu familia y después la situación de tus vecinos.