Doce días después de su última aparición en televisión y 51 desde que se le vio en el palacio presidencial celebrando el éxito electoral, el mandatario venezolano pidió permiso hoy para regresar a La Habana aconsejado por sus médicos.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, volverá a Cuba para someterse a un «tratamiento especial» de «oxigenación hiperbárica», seis meses después de la última sesión de radioterapia a la que fue sometido por el cáncer y en el que es su primer viaje al exterior desde que fue reelegido el 7 de octubre.
Doce días después de su última aparición en televisión y 51 desde que se le vio en persona en el Balcón del Pueblo del palacio presidencial de Miraflores celebrando el éxito electoral, Chávez pidió permiso hoy para regresar a La Habana aconsejado por sus médicos.
Así lo dijo el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, en una sesión extraordinaria del Legislativo en Maracay (centro) en la que leyó una misiva de Chávez solicitando permiso para ausentarse del país, como exige la Constitución cuando el jefe de Estado va a pasar más de cinco días en el exterior.
«Se me ha recomendado iniciar un tratamiento especial consistente en varias sesiones de oxigenación hiperbárica que, junto a la fisioterapia, siguen consolidando el proceso de fortalecimiento de la salud que he venido experimentando», dijo Chávez en su solicitud, aprobada de inmediato por el Legislativo.
«He venido velando por el debido cuidado de mi salud y cumpliendo celosamente con el plan de tratamiento complementario ordenado por el equipo médico que me atiende», añadió Chávez, al señalar que permanecerá en la «hermana República de Cuba, para cumplir con ese cronograma de terapia», aunque sin precisar el tiempo.
En horas de la tarde, durante el acto de la conmemoración del intento del golpe del 27 de noviembre de 1992, hoy convertido en día de la Fuerza Aérea, el ministro venezolano de Defensa, Diego Molero, leyó otra carta de Chávez.
«Queridos camaradas de armas, pueblo de Venezuela, al cumplirse el vigésimo aniversario de la rebelión cívico-militar del 27 de noviembre de 1992 se nos impone honrar el heroísmo y el sacrificio que marcaron aquella jornada memorable», dijo Molero al leer la misiva.
La fallida asonada del 27 de noviembre de 1992 fue protagonizada por un grupo de oficiales de la Aviación aliados del entonces detenido teniente coronel Hugo Chávez, en ese momento preso por el intento de golpe del 4 de febrero del mismo año, dejando un saldo de al menos unos 300 muertos, según versiones extraoficiales.
Chávez vuelve a la isla donde fue operado en dos ocasiones en junio del año pasado, tras la detección de un tumor del que solo se sabe que estaba en la zona pélvica, pero no su gravedad ni ubicación exacta.
En febrero pasado, el presidente fue sometido a una tercera cirugía también en La Habana y posteriormente se sometió durante varias semanas a radioterapia.
Hace unos meses volvió a repetir que ya se había recuperado completamente del cáncer y en sus últimas referencias a la enfermedad ha reiterado que se encuentra bien de salud.
Días antes de que culminara la campaña, el mandatario dijo a Efe al ser preguntado por el cáncer: «Ni me acuerdo de eso, pero ni me acuerdo».
En la carta enviada hoy a la Asamblea, el presidente explicó que en las últimas semanas ha estado «trabajando arduamente» en las tareas de Gobierno y adelantando «los asuntos relacionados con el inicio de un nuevo ciclo de la Revolución Bolivariana».
En ese sentido, Chávez recordó que detallará ante la Asamblea Nacional ese plan de Gobierno para el período 2013-2019, el próximo 10 de enero, con motivo de su asunción para el nuevo periodo presidencial.
El anuncio, en el que se no precisó el momento en que viajará, llega en momentos en que el mandatario había reducido a mínimos su exposición pública.
Ya había encarado la campaña para los comicios en los que obtuvo su tercera reelección a media máquina y un ritmo que sólo se vio intensificado en el trecho final, pero desde su victoria no encabezó ni un solo acto oficial en público.
El presidente ha estado, además, callado, una característica difícilmente asociable a un hombre que ha hecho de los medios de comunicación un instrumento para el ejercicio del Gobierno.
Ni siquiera la campaña para las elecciones regionales del 16 de diciembre próximo en la que se encuentra inmersa Venezuela ha sacado al presidente del silencio.
«No me corresponde a mí, yo ya hice mi campaña», dijo Chávez el 1 de noviembre en una de sus escasas actividades transmitidas por televisión al adelantar su renuncia la protagonismo durante las siguientes semanas.
