Algo huele mal en la industria del gas. Por tercer año consecutivo, los consumidores pagamos más de lo permitido por ley en las cuentas de gas. Esto, luego de que el 2014 Metrogas volviera a exceder el límite de rentabilidad permitido en la distribución de gas domiciliaria. Actualmente, la ley permite en este mercado hasta 11% de rentabilidad, pero la empresa obtuvo 12,2% durante 2014, según informó la Comisión Nacional de Energía. Y en años anteriores ya había excedido los límites de utilidades permitidos en los años 2012 (11,4%) y en 2013 (16,9%).
El gobierno, a través del Ministerio de Energía, ha dicho que no puede hacer nada para impedir este exceso de ganancias en las empresas de gas, debido a que la ley que las rige data de 1989, poco antes del retorno a la democracia.
Es decir, en fácil, los consumidores nos encontramos desprotegidos y, al parecer, deberemos seguir pagando más por este servicio básico.
Por ello, en ODECU creemos indispensable la pronta aprobación del proyecto de ley de gas, para resguardar a las familias chilenas en un servicio básico y monopólico.
Las empresas de distribución de gas por redes son monopolios, y los consumidores vivimos y sentimos ese monopolio todos los días. Lo vivimos porque estamos cautivos, un consumidor no se puede cambiar de gas natural a GLP por los altos costos de cambio, o sencillamente es imposible porque vivo en un edificio con gas natural. Por ello, los monopolios se tarifican. No me puedo cambiar de distribuidora eléctrica, ni de empresa de agua potable, pero ellas están tarificadas. No vemos ninguna razón para que las empresas de gas no estén tarificadas, es la única y verdadera forma de proteger a los consumidores frente a estos monopolios. No basta ponerle límite a la rentabilidad.
[cita tipo=»destaque»]Las empresas de distribución de gas por redes son monopolios, y los consumidores vivimos y sentimos ese monopolio todos los días. Lo vivimos porque estamos cautivos, un consumidor no se puede cambiar de gas natural a GLP por los altos costos de cambio, o sencillamente es imposible porque vivo en un edificio con gas natural. Por ello, los monopolios se tarifican. No me puedo cambiar de distribuidora eléctrica, ni de empresa de agua potable, pero ellas están tarificadas. No vemos ninguna razón para que las empresas de gas no estén tarificadas.[/cita]
Sin embargo, el proyecto mantiene el actual sistema de chequeo de rentabilidad y límite a la misma, eso sí que reduciéndolo del 11% al 9%. En la propuesta, además, cuando una empresa sobrepasa el límite de rentabilidad en el promedio de tres períodos móviles, pierde inmediatamente su condición de libertad tarifaria, pasando a ser tarificada por el regulador. Con esto traslada la actual consulta al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) a una etapa posterior, solo para salir de la tarificación.
En ODECU creemos que, si finalmente no se opta por tarificar por ley, mover el momento de intervención del TDLC es fundamental. La actual intervención del TDLC en esta etapa solo entorpece, dilata y hace ilusoria la protección de los consumidores ante rentabilidades excesivas de empresas que claramente son monopólicas.
Asimismo, aplaudimos que el proyecto establezca un mecanismo claro y simple para compensar a los consumidores en caso de exceso de rentabilidad, en que se le ordena a la empresa devolver el exceso cobrado a través de un descuento directo en la cuenta de gas del cliente o en dinero en efectivo.
Hemos visto en la prensa amenazas de empresas extranjeras, señalando que, de aprobarse una u otra norma de este proyecto, demandarán al Estado de Chile ante organismos internacionales. Solo decir que, a nuestro entender, son amenazas que carecen de sustento, ya que de ninguna manera se busca cambiar las reglas, sino que, por el contrario, se trata de llenar los vacíos existentes con el fin de entregar mayores certezas a todos los actores del mercado, sin dejar a un lado el interés de los consumidores.
