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Consulta ciudadana viciada en Coyhaique Opinión

Consulta ciudadana viciada en Coyhaique

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El sábado 11 de abril, la Municipalidad de Coyhaique lanzó una consulta ciudadana en la cual se puede votar a través de internet. ¿La pregunta? Si las autoridades regionales deben o no cerrar las fronteras debido a la pandemia por coronavirus que enfrenta Chile y el mundo. Una pregunta y tal vez con intención noble, considerando que la región es la que registra el menor número de contagiados y que, además, dichos contagiados son importados.

El alcalde de Coyhaique, Alejandro Huala, manifestó que «la idea tiene que ver con no dejar entrar ni salir a personas, pero sí dejando el abastecimiento para todos, porque la idea es el autocuidado y queremos saber si la ciudadanía lo comparte o no. Luego llevaremos este sentir a la intendenta para que considere la sabiduría popular y ver cómo se combate esta pandemia que a todos nos tiene tan afligidos». Una postura correcta, a mí parecer, de un alcalde preocupado por su gente.

Sin embargo, los resultados que dará la consulta ciudadana son absolutamente inútiles. Soy un convencido de lo importante que es la “sabiduría popular”, como el mismo Huala la llamó, pero lo lógico sería que esa sabiduría viniera de la propia ciudad de Coyhaique y no de cualquiera que pueda entrar al enlace dispuesto por la municipalidad para emitir el voto.

En esta plataforma, uno entra solo con su RUT, cosa que, reconozco, me llamó la atención por la simpleza del proceso. Si bien cuando intenté votar de nuevo el sistema me dijo que mi RUT ya había votado, igual me invitaba a votar de nuevo. Intenté y, ¡sorpresa!, terminé votando más de diez veces. Además, no vivo en Coyhaique hace más de 10 años. Vuelvo con frecuencia, pero lo cierto es que no es mi residencia hace mucho tiempo y no sé si mi postura es igual de válida que la de alguien que sí vive en Coyhaique. A pesar de todo eso, pude votar.

Solo a modo de mostrar lo ridículo de este proceso de consulta y de su inexistente utilidad, probé también con el RUT de gente que está muerta y que, dada su actual inexistencia, claramente es imposible que voten. En fin, pude votar con los RUT de Augusto Pinochet, Gladys Marín y Pedro Lemebel. También pude votar por gente que, claramente, no vive en Coyhaique y no tendría por qué votar en esta consulta. De esta forma, han sufragado en el proceso las siguientes figuras nacionales: Sebastián Piñera, Alberto Plaza, Miguel Krassnoff y Raquel Argandoña, solo por mencionar algunos y, quizás, los más incoherentes.

Partidarios de la consulta podrán decir que este proceso se hace dentro de un contexto de buena fe de parte de los votantes, pero ¿cómo garantizan la legitimidad de cada voto? Dada la contingencia sanitaria, es claro que voto presencial es imposible. Pero si la municipalidad no cuenta con los implementos y recursos para hacer una consulta ciudadana digital decente, es preferible que mejor no la haga.

Finalmente, ¿acaso el alcalde Alejandro Huala aceptaría ganar (o perder) su reelección en un proceso en estas condiciones electorales que su propia administración impuso? La verdad, lo dudo.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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