«Tenemos que trabajar mucho más con los niños y enseñarles desde pequeños el respeto entre los seres humanos, entre hombres y mujeres», dijo la directora ejecutiva de ONU Mujeres en una entrevista a Efe.
La ONU lanza mañana una iniciativa con 16 puntos para acabar con la violencia contra las mujeres, en la que considera esencial educar desde la infancia en «la igualdad real entre hombres y mujeres», dijo a Efe la directora ejecutiva de ONU Mujeres, la chilena Michelle Bachelet.
«Tenemos que trabajar mucho más con los niños y enseñarles desde pequeños el respeto entre los seres humanos, entre hombres y mujeres», dijo Bachelet en una entrevista a Efe en la que avanzó que la educación infantil forma parte de los 16 puntos que ONU Mujeres lanzará mañana para acabar con la que considera «lacra mundial».
La expresidenta de Chile (2006-2010) defendió que los Gobiernos de todos los países del mundo y las sociedades deben reconocer la importancia de dar herramientas a los menores «para transformar las relaciones entre los géneros y que éstas se construyan sobre la armonía, el respeto mutuo y la no violencia».
«Hay que enseñarles lo que es la dignidad de todo ser humano y mostrarles mecanismos no violentos de resolución de conflictos», añadió Bachelet, quien reconoció los «importantes avances» de las últimas décadas en la lucha contra la violencia hacia las mujeres, pero aseguró que ha llegado el momento de «pasar a la acción».
Para ello, ONU Mujeres lanza este año, con motivo del Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que se conmemora el 25 de noviembre, una llamada concreta a los líderes mundiales para que apliquen en sus políticas 16 puntos clave para acabar con toda forma de violencia dirigida al género femenino.
«No se trata sólo de acabar con la violencia doméstica y los feminicidios, sino también con el matrimonio forzado precoz, los crímenes de honor, la violación o la mutilación genital», explicó Bachelet, quien reconoció que muchos países tienen hoy legislación al respecto, pero que algunos presentan una «brecha de implementación» con la que hay que acabar.
Bachelet dijo que el mensaje que lanza este año ONU Mujeres se resume en que los Gobiernos deben garantizar a las mujeres «protección, prevención y provisión de servicios», mientras que destacó la vital importancia que tiene en la prevención, además de la educación de los niños, el impulso del liderazgo de los jóvenes.
«Se empieza con la educación de los niños desde pequeños y después se logra el compromiso de los jóvenes», indicó a Efe la exmandataria, que subrayó la necesidad de que los Gobiernos sepan «involucrar a los jóvenes, hombres y mujeres, en la lucha contra la violencia».
Bachelet presenta este martes esos 16 puntos -uno por cada día que separa el Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres del Día de los Derechos Humanos, el próximo 10 de diciembre- en la sede central de la ONU en Nueva York y acompañada por el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
Uno de los puntos es «trabajar para que los jóvenes y los niños sean unos campeones del cambio», mientras que otro llama a los Gobiernos a redoblar los esfuerzos por movilizar concretamente a «hombres y niños varones contra la violencia hacia las mujeres y las niñas, y promover la igualdad y la solidaridad entre géneros».
Hay 14 pasos más, entre los que destacan el pedir a los Gobiernos que ratifiquen los tratados internacionales en la materia, que adopten y refuercen sus legislaciones, que desarrollen planes de acción propios, que acaben con la impunidad en los casos de violencia o que garanticen el acceso universal a servicios básicos de salud y justicia a mujeres y niñas, entre otros.
«La violencia es inaceptable. Sabemos lo que hay que hacer para avanzar en la lucha de un problema global y multidimensional, y tenemos que pasar a la acción ahora», añadió la chilena, quien llamó sobre todo a «generar conciencia y movilización en las comunidades para luchar con una violación que es sistemática y global».
La violencia contra las mujeres, «de la que los niños y niñas acaban siendo víctimas también», según Bachelet, «no es un asunto privado, sino de todos nosotros, de toda la sociedad», que debe luchar contra «una de las violaciones de los derechos humanos más extendida y al mismo tiempo uno de los crímenes menos enjuiciados».
La directora ejecutiva de ONU Mujeres subrayó que hay que poner fin a que hoy en día haya todavía 603 millones de mujeres que viven en Estados donde la violencia contra ellas no es un delito o que más de 60 millones de niñas sean dadas en matrimonio siendo menores, o que entre 100 y 140 millones de mujeres y niñas hayan sufrido la mutilación genital.
