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Pablo Larraín: «La franja del Sí es un compendio de toda la estupidez posible»

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«En un minuto hubo un cambio, pusieron a otra gente, y la gente que entró a salvar la cosa, lo que optó por hacer fue atacar a la franja del NO, lo que fue la lápida final sobre la franja del SÍ», sostuvo el cineasta.


El director de cine Pablo Larraín comentó este martes su premiada cinta «No». En entrevista con Radio ADN el cineasta sostuvo que «la franja del Sí, si la analizas un poco, es un compendio de toda la estupidez posible que se pueda tener en un medio de comunicación. No creo que sea posible organizar una franja de una manera más equivocada que esa. Está toda la tontera de la comunicación política de la derecha metida, concentrada en esos 15 minutos diarios».

En esa línea, opinó que «en un minuto hubo un cambio, pusieron a otra gente, y la gente que entró a salvar la cosa, lo que optó por hacer fue atacar a la franja del NO, lo que fue la lápida final sobre la franja del Sí».

Respecto a la franja del NO, Larraín indicó que «influyó muchísimo, fueron capaces de generar algo muy potente (…) Cuando la gente ya estaba inscrita, vino esta necesidad de hacer que la gente perdiera el miedo a votar, y por una opción desconocida, que confiara en lo que podía venir, que era más positivo. Todo eso arma una historia interesante y nos animamos a contarla».

«Esta es la historia de cómo un grupo de gente común y corriente se organiza para derrotar a un dictador. Entonces es difícil, nosotros no estamos acostumbrados a ganar ni hacemos películas donde la gente triunfa. En general, el cine chileno y latinoamericano tiene una visión pesimista», acotó.

El director de la película NO reparó que su obra «no es un tratado histórico sobre la franja del NO, sino que es una lectura que nosotros, un grupo de gente, hace 25 años más tarde a partir de lo que pasó en Chile después del plebiscito».

Consultado por los problemas ocurridos en Ñuñoa, en donde se les cursó una multa por la publicidad del filme, Larraín aclaró que eso sólo ocurrió con los afiches del NO, pero que no tuvieron problemas con las imágenes iniciales sobre el SÍ.

«El señor Sabat todavía no entiende que la calle es un espacio público y que todos tenemos derecho a expresarnos en ella. Afortunadamente veo que el señor Labbé está tambaleando frente a Josefa Errázuriz, ojalá se vaya para la casa igual que Sabat y que toda esta gente que cree que puede administrar lo que la gente piensa y hace», concluyó.

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