Reinstala debate sobre entrega de fondos públicos a la universidad
El rector de la U. Católica dijo de manera categórica que los médicos de la red no prescriben píldoras antinconceptivas a las mujeres que desean prevenir embarazos no deseados.Y aseguró que ello no rige en los consultorios públicos en convenio con la casa de estudios, ubicados en La Pintana y Puente Alto, ya que se ajustan a la política de planificación familiar dispuesta por el Minsal.
El rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, reiteró este miércoles que los centros médicos de la red Salud UC no siguen las políticas del Ministerio de Salud en materia de planificación familiar y, por lo tanto, sus médicos no prescriben a sus pacientes píldoras anticonceptivas para prevenir embarazos no deseados.
En declaraciones a Radio Sonar, Sánchez afirmó que es posible que, en algunos casos y para tratamientos específicos, se receten estos fármacos, pero no para «una planificación familiar artificial», cuestión que se ajusta a los «principios» que rigen a la institución y a los cuales los facultativos necesariamente deben adherir.
«Las pastillas anticonceptivas tienen muchos efectos. Si yo estoy tratando un ovario poliquístico, si estoy haciendo un tratamiento médico, por supuesto que dentro de ese arsenal terapéutico los medicamentos anticonceptivos pueden estar indicados; y si el médico quiere indicarlo para una planificación artificial, eso no está dentro de los marcos nuestros, por lo tanto, la persona adhiere a eso y, si no adhiere, puede trabajar en otro lado».
Al respecto enfatizó que los médicos no están sometidos a prohibiciones. «Nosotros no prohibimos las cosas; nosotros solicitamos adherencia a ciertos principios, prácticas y conductas. Cuando una persona trabaja en nuestra institución, adhiere al marco valórico de la institución, así que nadie está prohibiendo situaciones, sino que los profesionales que están en el área que usted menciona, libremente entran a trabajar aquí, y como toda institución en el marco del trabajo, las personas que adhieren a ese marco de trabajo, y los que no, trabajan en otras instituciones».
Con sus declaraciones, Sánchez volvió a instalar el debate sobre la entrega de recursos públicos a la Universidad Católica, aunque especificó que la política de los centros Salud UC no es la misma que rige a los consultorios que tienen convenio con la Universidad y donde –asegura– sí están vigentes las políticas de planificación familiar dispuestas por el Minsal.
«Tenemos más de 90 mil personas en La Pintana y Puente Alto que están a cargo de la Universidad Católica en consultorios públicos donde recibimos un per cápita del Estado. Y en esos consultorios, que están en Puente Alto, hemos llegado desde hace más de 10 años a un acuerdo entre el Ministerio de Salud y con sus propios dependencias que entregan todos los elementos de planificación familiar que el Ministerio de Salud tiene aprobados a nivel nacional. Por lo tanto, las personas que están en el sistema de salud pública que administra la universidad, tienen el aporte que requieren a través del Estado y a través de este convenio».
