Suma y sigue: testimonio apunta a uso de boletas profesionales sin permiso por parte de Novoa

Teresa Riera Rowlins es ejecutiva de Turismo Cocha y se vio involucrada en el Caso Penta, tras haberse conocido diversas boletas ‘ideológicamente falsas’, que se habrían destinado a campañas políticas.

Como consignó el reportaje de El Mostrador, basado en la carpeta del Caso Penta, uno de estos documentos era la boleta n.° 177, emitida a Penta en junio del 2013 por un monto de $2.777.778, por parte de Teresa Riera. Un peritaje de la policía determinó que esta había sido escrita por Bernardita Chamorro, secretaria del estudio de abogados ‘Guerrero, Olivos, Novoa y Errázuriz’, staff del que hace años participa el ex senador y presidente de la UDI, Jovino Novoa.

De acuerdo a la declaración que la secretaria entregó a funcionarios de la PDI, era una práctica habitual que el ex senador le “dictara” boletas que iban dirigidas a Penta.

En la misma declaración Chamorro entregó antecedentes sobre documentos que fueron cargados a las empresas de Délano y Lavín. Allí se refirió a una boleta de junio del 2013, por un monto de $2.777.778, que pertenecía a Teresa Riera.

El talonario

La empresaria explica que, para llevar a cabo los pagos, ella entregó el talonario n.°2, «para que ellos se encargaran de hacerla. Yo me desentendí del tema de las boletas», aseguró Teresa Riera Rowlins. Luego de que finalizó sus labores en el 2003, recibió su talonario de boletas de vuelta, según informó La Segunda.

Teresa Riera registra inicio de actividades en el SII el 2003, bajo la actividad económica de corredor de propiedades y otras actividades empresariales y, según la pericia realizada por la PDI –que luego fue ratificada por el testimonio de Bernardita Chamorro–, “el llenado de la boleta n° 177 procede de la mano caligráfica de Bernardita Chamorro Orellana, misma situación para los folios n° 178, 179, 180, 181 y 182 del talonario previamente señalado”. Si bien las boletas son de Teresa Riera, estas fueron llenadas por la secretaria de Novoa.

Pero no fue hasta el 10 de octubre del 2014 cuando Teresa Riera se entera de que entre las boletas vinculadas al Caso Penta, se encuentra involucrado su nombre. Su abogado defensor le consultó por una noticia que apareció en el vespertino y explica que él obtuvo información de la página del SII, «ahí pudo constatar que había tres boletas del año 2013 que yo no había emitido y cuyo dinero tampoco recibí». Dichas boletas se establecen por montos de $723.023 a Guerrero y Compañía; $283.889 a empresas Penta S.A. y $ 449.333 emitida a Inversiones y Mandatos S.A.

En la declaración, Riera explica que se contactó con la secretaria Bernardita Chamorro, «ella me dijo que no me preocupara, que Jovino Novoa quería reunirse conmigo el lunes y que él iba a solucionar todo. Yo le dije que por instrucción de mi abogado no me iba a juntar con Jovino Novoa. Yo le pregunté por la boleta de Penta y qué significaba esta boleta, ella dijo que no me preocupara, que Jovino Novoa solucionaría todo y nos juntáramos el lunes».

Además, asegura que su amiga, Cecilia Ibáñez, la llamó nuevamente, «me indicó que Jovino Novoa la había llamado para saber mi respuesta acerca de la reunión, al saber que yo no iba a asistir y que se contactara con mi abogado, me mandó el recado con Cecilia indicando que el abogado Miguel Schweitzer se iba a comunicar con mi abogado por este tema, hecho que no ocurrió hasta hoy».

Teresa Riera señaló en su declaración que no extendió la boleta n.° 177, por ende, no prestó servicios para la empresa Penta S.A., señalando además la falsedad en la firma registrada en el citado documento, «señalo que no la extendí, no presté servicios para Penta, no es mi letra que aparece ahí y mi firma está falsificada», expone en su declaración a la Fiscalía.