Sobre Lagos asegura que es un «candidato del pasado»
El renunciado asesor del Mineduc señala haberse sentido sorprendido cuando padres y apoderados se opusieron al fin del copago, ya que «da cuenta que vivimos en un país bastante conservador: puedo querer más integración, pero no con mis niños. Ahí uno se da cuenta cuán neoliberales somos. En la defensa del derecho a pagar se ve la derrota del Estado y la victoria de la sociedad neoliberal».
El recién renunciado asesor del Mineduc y fundador de Revolución Democrática, Miguel Crispi, disparó con todo en contra del senador de la DC, Ignacio Walker, a quien acusa de ser el principal adversario de la reforma educacional que impulsa el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.
En entrevista con El Mercurio, Crispi sostiene que no esperaba la reacción de padres y apoderados frente a terminar con el copago, ya que «en los padres que se opusieron en su momento al fin al copago, sí había articulaciones impulsadas por la UDI y la oposición, pero eran muchos padres, y uno no puede suponer que todos eran de la oposición. Da cuenta que vivimos en un país bastante conservador: puedo querer más integración, pero no con mis niños. Ahí uno se da cuenta cuán neoliberales somos. En la defensa del derecho a pagar se ve la derrota del Estado y la victoria de la sociedad neoliberal».
Consultado respecto a que los padres lo que defendían era el derecho a elegir, el sociólogo y ex dirigente estudiantil asegura que «ese fue un debate muy tergiversado, donde Ignacio Walker (DC) jugó un rol clave. Walker es el principal adversario de la reforma educacional».
Y ahonda en su crítica al legislador falangista en el hecho que «él construyó ciertas imágenes; por ejemplo, que este proyecto deterioraba la libertad de elegir de las familias, cuando lo que teníamos era un sistema donde las familias no podían elegir».
«Se elegía en función de la capacidad de pago, y eso no es elegir. Dimos una pelea fuerte, porque no estuvimos disponibles a aceptar esas construcciones malintencionadas que buscaban debilitar la reforma y defender otros intereses, los de los sostenedores», explica.
Respecto a su salida del Mineduc junto a Gonzalo Muñoz, Crispi explica que entraron al gobierno bajo la fórmula de «colaboración crítica» para empujar agendas, especialmente la educacional, «poniendo cuadros sin ser parte de la NM. Esa fórmula encuentra un techo cuando nos convertimos en partido».
Asimismo, responde a los cuestionamientos que los acusa de oportunistas, indicando que «lo que para algunos es oportunismo, para nosotros es consistencia. Si nos hubiéramos ido antes, nos criticarían por otra cosa. Es de sentido común que dejemos de ocupar cargos de responsabilidad política en un gobierno que no es el nuestro».
Crispi también habla sobre la situación en la que se ha visto involucrada Carolina Toha en medio del escándalo por platas de SQM para financiar al PPD cuando ella era la presidenta del partido, señalando que le cree a la alcaldesa de Santiago en su defensa al precisar que no participó en ese hecho.
«Sí, le creo. Ella ha marcado una diferencia respecto de cómo enfrentar este problema, a diferencia de otros del PPD. Mientras unos decían que en Santiago había que hacer una encuesta vinculante -una de las aberraciones democráticas más ingeniosas del último tiempo-, ella habló de primarias», añade.
También sostiene que Ricardo Lagos como carta presidencial de la Nueva Mayoría es del pasado y no cree en que sea el abanderado.
«No creo que Lagos termine siendo candidato. Creo que Lagos es un candidato del pasado y nuestra preocupación hoy es encontrar un candidato presidencial para RD. Tener nuestro candidato y sostener una primaria», menciona.
En ese sentido, descarta hacer una posible alianza con el candidato del PRO, Marco Enríquez Ominami, ya que sus explicaciones sobre el financiamiento de su campaña «dejan mucho que desear».
