El individuo también se hizo conocido hace algunos meses como el autor de un mural alusivo a José Piñera. Dos causas en tribunales de familia dan cuenta de los problemas en la relación con su hija y la madre de esta.
Felipe Garrido, por unas horas fue el mejor ejemplar de hombre evolucionado. O al menos creativo. Con un cartel que decía «Estoy semidesnudo y rodeado del sexo opuesto y me siento protegido, no intimidado… quiero lo mismo para ellas», se hizo rápidamente conocido en las redes sociales y su consigna fue incluso reproducida por medios internacionales.
Pero la realidad, lamentablemente, muestra un lado más oscuro. Derechamente opuesto. Al menos dos causas en los tribunales de familia dan cuenta de que Garrido ha tenido serios conflictos con su ex pareja, que incluyen agresiones físicas. La mujer Francesca Palma relató que fue pareja de Garrido desde los 15 años, pero la relación se deterioró al poco tiempo de nacer la hija de ambos.
“Siempre nos cortaban la luz. La persona que nos ayudaba a cuidar a la niña atestigua todo esto. Ahí empezaron las peleas, porque yo ya estaba aburrida de mantenerlo, que no trabajara. Una vez me tiró un plato y me rompió el tendón, tengo una cicatriz en el pie. Llegamos a la Clínica y él me pidió que no le contara al doctor que me atendió para que no se fuera detenido. Me arrepiento mucho de haberle hecho caso”, dijo Francesca Palma a El Desconcierto. «Mi papá muchas veces me fue a buscar al departamento y yo estaba con la cara marcada por sus golpes”, agregó.
Según los procesos judiciales, el hecho de que Felipe Garrido no pueda acreditar un trabajo formal o una fuente fija de ingresos ha hecho que pida la rebaja de la pensión alimenticia que le corresponde. “Tampoco se ha hecho presente en las terapias de familia ordenadas por el Juzgado como forma de mediación por las visitas y pensión”, afirma Francesca Palma.
En agosto de este año, Garrido se hizo conocido por su trabajo como muralista. Especifíficamente por una pintura alusiva al creador de las AFP José Piñera.
