
El ex senador, que se encuentra cumpliendo arresto domiciliario nocturno, luego de ser formalizado por presunto cohecho y delitos tributarios por el caso SQM, rompe el silencio y declara que, en el estado que se encuentra el país, "es un lujo tener a dos ex Presidentes, y valoro que ambos estén decididos a enfrentar un desafío presidencial; es un privilegio que Chile tenga que elegir entre ambos".
Para el ex ministro de Economía, la situación chilena es comparable con la norteamericana: "Considero mucho más potente a Piñera que al candidato republicano, y a Lagos que a la candidata demócrata".
Reafirmando su tesis de que las presidenciales se definen entre los ex Mandatarios, señala que: "Si baja Piñera, gana Lagos, y si se baja Lagos, gana Piñera", informa El Mercurio.
Según el ex presidente de la UDI –quien se muestra contento por el escenario Lagos-Piñera–, "esta elección no está para buscar a los DJ Méndez. La gente quiere líderes, certezas, no más aventuras, ya basta de buscar al más simpático o al más popular: Chile debe elegir al mejor Presidente".
En ese sentido, argumenta que "no existe el fenómeno Guillier" y dice que es natural que alguien que ha tenido exposición televisiva sea bien evaluado. "Pero si terminan bajando a Lagos por Guillier, nosotros ganamos", sentencia.
Por último, con respecto al actual panorama del Gobierno, marcado por el quiebre con algunos parlamentarios, expresa que "me duele cómo a veces algunos tratan a la Presidenta Bachelet, sin ningún respeto ni consideración". Además, dice estar impresionado por el "bullying" que le hacen sus propios partidarios.