Campos cree que hay «falta de comprensión lectora» entre quienes lo acusan de querer liberar a presos de Punta Peuco

El ministro de Justicia respondió este lunes a la ola de críticas que despertaron sus palabras el fin de semana, respecto de que los presos con enfermedades terminales puedan ser puestos en libertad para terminar de cumplir sus condenas en sus respectivos domicilios. Una  situación que Campos afirmó que le parecía «obvia», matizando en –conversación con El Mercurio– que «es un tema de la máxima importancia y en Chile no hemos tenido el coraje para abordarlo».

A lo anterior, agregó que «desgraciadamente, todos vamos tomando posiciones sobre esta materia en base a lo que son nuestras visiones o intereses particulares, y no tenemos una mirada colectiva de país. Creo que los derechos humanos son válidos para todo el mundo, sin distinción de ninguna especie. Pero pareciese que algunos no lo creen así».

Luego del rechazo que motivaron estas declaraciones, especialmente entre parlamentarios de la Nueva Mayoría, que derechamente las calificaron como «una estupidez», Campos aclaró que no se refería específicamente a los condenados por delitos de Derechos Humanos.

“Hay falta de comprensión de lectura porque, por lo que leo hoy, algunos creen que a través de mis declaraciones lo que yo pretendo es darles una solución a los que están condenados en Punta de Peuco, y lo que estoy dando es una afirmación general, estoy hablando de cualquier delincuente, estoy pensando en un violador, en un parricida, que está sufriendo una enfermedad terminal”, aseguró en un punto de prensa.

El ministro sostuvo que sus palabras fueron una opinión estrictamente personal. Pero insistió en su argumentación de fondo. “Yo creo que todos esos delincuentes deberían tener el derecho de morir en su casa, independientemente del delito que han cometido”, expresó.