
Crédito: Agencia Uno
Apenas pisó suelo chileno, el administrador apostólico Celestino Aós visitó a Juan Carlos Cruz, James Hamilton y José Andrés Murillo, víctimas de Fernando Karadima tras su viaje a Roma, donde se reunió con el Papa Francisco. El encuentro tuvo lugar en la Fundación para la Confianza y donde se abordó la crisis que sacude a la institución eclesiástica en el país, después de todos los casos de abusos sexuales en los que se ha visto envuelta.
En la instancia, se recalcó que “lo más importante son los hechos concretos de verdad, de justicia, de reparación y de prevención”, y se enfatizó en que el Estado tiene todos los elementos necesarios “para ponerse los pantalones” en cuanto a la defensa de los niños y las víctimas.
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Asimismo, se refirieron a la labor del Estado y le pidió “hacerse cargo”, ya que, si no lo hace, quiere decir que será un Estado “traidor de la población más desvalida (niños y niñas)”.
Respecto al Informe Scicluna, documento realizado por el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, sobre los abusos sexuales cometidos por los religiosos de la Iglesia católica chilena, y al cual Aós dijo no haber tenido acceso durante su viaje, James Hamilton dijo que “no está en el poder de él (Aós) decidir si trae o no el documento, incluso lo pudo haber pedido y quizá le pueden haber dicho que no (…) hoy en día los tribunales y fiscalías tienen muchísimo más que el Informe Scicluna en sus manos”.
Las víctimas de Karadima valoraron la visita a la Fundación para la Confianza y también destacaron el gesto de Aós de pedirles perdón calificándolo como una actitud “notable” que nunca fue asimilada por los cardenales Francisco Javier Errázuriz y Ricardo Ezzati.