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Fraude en el Ejército: ministra Rutherford dicta acusación por licitaciones truchas para misión de paz en Haití PAÍS

Fraude en el Ejército: ministra Rutherford dicta acusación por licitaciones truchas para misión de paz en Haití

En su investigación, Rutherford logró establecer que en 9 ocasiones en menos de un año la empresa Anpever se adjudicó licitaciones para la prestación de servicios o suministro de repuestos de material o equipamiento desplegado en la misión de paz de Chile en Haití, por un monto total de $417.433.245. En la resolución, la ministra acusó al cabo segundo Felix Alexis Calderón Leiton, como autor del delito de cohecho, en tanto, el sargento Antonil Sergio Velásquez Vigueras enfrenta acusación por soborno.


En otra arista de su indagatoria sobre los hechos de corrupción en el Ejército, la ministra en visita de la Corte Marcial, Romy Rutherford Parentti dictó acusación por soborno y cohecho en las licitaciones para la misión de paz en Haití.

En la resolución, la ministra acusó al cabo segundo Felix Alexis Calderón Leiton, como autor del delito de cohecho, en tanto, el sargento Antonil Sergio Velásquez Vigueras enfrenta acusación por soborno por ilícitos ocurridos en la relación entre la División de Mantenimiento del Ejército y la empresa Anpever (o Turra y Pino).

“En efecto, de los antecedentes resulta que los pagos a los que se ha hecho referencia aparecen asociados al hecho de haberse adjudicado trabajos a ejecutar en el Ejército de Chile por parte del proveedor Anpever en términos que resulta posible concluir que un Sargento Segundo – estrechamente vinculado a ese proveedor-, pagó dineros al Cabo Segundo, llamado a intervenir en los respectivos procesos de licitación, quien vulneró de esa manera su deber de imparcialidad en la recta administración de los recursos fiscales”, indica la acusación.

Anpever es una sociedad de responsabilidad limitada que fue constituida en mayo de 2013, entre otras personas, por Antonil Velásquez Vigueras quien -entre los años 2013 y 2015-, se desempeñó en la Jefatura de Mantenimiento (Jefman) y en el Cuartel General de la División de Mantenimiento (Divman).

Justamente, los ilícitos se habrían cometidos entre mayo de 2014 y abril de 2015. En su investigación, Rutherford logró establecer que en 9 ocasiones distintas, en menos de un año, la empresa mencionada se adjudicó licitaciones para la prestación de servicios o suministro de repuestos de material o equipamiento desplegado en la misión de paz de Chile en Haití, por un monto total de $417.433.245.

Salvo un solo caso, en todas esas licitaciones el único oferente fue la empresa ‘Anpever’, empresa que -en cada oportunidad-, ofreció el valor máximo que el Ejército estaba dispuesto a pagar por los respectivos suministros o servicios, señala la resolución. No solo eso, en la licitación donde participó otra empresa (SMMI), ésta “recibió información incorrecta sobre aspectos relevantes en la fase de consultas”.

La indagatoria añade que “las licitaciones de mayor cuantía correspondían al mantenimiento de grupos generadores en Haití, respecto de los cuales la empresa Anpever efectuó un informe sobre su estado y condiciones, en forma previa a la licitación abierta para su posterior mantenimiento, adquiriendo de ese modo información privilegiada, a la que no pudieron acceder otros eventuales interesados”.

Asimismo, la resolución añade que “las licitaciones aludidas estaban a cargo del Departamento de Asuntos Internacionales (Dapasint), órgano que integra la Jefatura de Mantenimiento (Jefman), dependiente de la División de Mantenimiento (Divman) del Ejército de Chile”.

En tanto, el cabo Calderón, que se desempeñaba en el Dapasint, estaba encargado de preparar las bases de esas licitaciones, de elaborar las respuestas a las consultas de eventuales interesados y, además, integraba con derecho a voto el Comité de Evaluación de las Ofertas, órgano decisivo para la adjudicación respectiva.

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