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La batalla por el Panul y las amenazas al último bosque nativo de Santiago PAÍS Crédito: Red Precordillera

La batalla por el Panul y las amenazas al último bosque nativo de Santiago

Este ecosistema es de vital importancia para Santiago, ya que limpia el contaminado aire metropolitano. Pero desde 2008 se ha visto amenazado, debido al intento de urbanizarlo. El 13 de enero de 2021, la inmobiliaria Gesterra –propiedad de la familia Navarrete, ligada a Oxiquim, y dueña del fundo Panul, que comprende 543 hectáreas– presentó un proyecto de división predial ante la Dirección de Obras Municipales (DOM) de La Florida, con el que buscan concretar la construcción de calles y alumbrado público. La municipalidad emitió un comunicado negando que existiera un proyecto inmobiliario, aunque días más tarde se desdijo, publicando el acta de observaciones del mismo, con una marca en rojo que decía «rechazado», dando a entender que efectivamente se presentó un proyecto inmobiliario en el sector. Y si bien el actual Plan Regulador Comunal (PRC) de La Florida –que rige desde 2015– prohíbe la construcción de viviendas en el Panul, sí permite los equipamientos. Los dueños del predio, en tanto, advirtieron que iniciarán acciones legales contra el municipio, encabezado por Rodolfo Carter. «Por más que usted insista en esta actitud, El Panul es una propiedad privada y pretender imponerle, en los hechos y por la fuerza, el tratamiento de un parque comunal o público es un abuso de autoridad que no conduce a nada», señalaron desde la inmobiliaria.


Desde el 2008, el Panul ha visto amenazada su biodiversidad. El último bosque nativo en la ciudad de Santiago, ubicado en la precordillera de La Florida, alberga especies como el litre, el quillay y el espino, y especies protegidas, como el bollén y el guayacán. En este lugar también viven diversas especies de aves, como el tijeral, el águila mora y el picaflor cordillerano.

Este ecosistema es de vital importancia para Santiago, ya que limpia el contaminado aire metropolitano, pero desde 2008 se ha visto amenazado, debido al intento de urbanizarlo. Y si bien ese proyecto no tuvo éxito, una nueva amenaza podría poner en serio riesgo este bosque esclerófilo.

Desde el 2006, la Red Precordillera ha librado una dura batalla por hacer del Panul un lugar público. Actualmente es de propiedad privada. Pertenece a la familia Navarrete, ligada a Oxiquim. La historia dice que en 1977, Vicente Navarrete padre compró un total de 543 hectáreas, correspondientes a los terrenos que forman el fundo Panul en el sector de Lo Cañas en La Florida, que fueron traspasados por la Universidad de Chile al empresario mediante un remate a un único postor, en el que se pagó un millón de pesos de la época, el equivalente a 17 millones de hoy.

¿Qué ocurre en el bosque Panul?

El 13 de enero de 2021, la inmobiliaria Gesterra, de la familia Navarrete, presentó un proyecto de división predial ante la Dirección de Obras Municipales (DOM) de La Florida, con el que se busca concretar la construcción de calles y alumbrado público.

La situación fue denunciada por la Red Precordillera. Su vocero, Sebastián Sepúlveda, detalló que «lo que ellos buscan es poder concretar calles, que están planificadas dentro del plan regulador pero nunca se han hecho. Hay una norma en la Ley de Urbanismo y Construcción que dice que, cuando loteas, puedes entregar estas calles al Estado y te concreta esas calles».

Tras la denuncia, la Municipalidad de La Florida emitió un comunicado negando que existiera un proyecto inmobiliario, señalando que el municipio «modificó el Plan Regulador prohibiendo la construcción de viviendas en el bosque el Panul. Dicha modificación se encuentra vigente y publicada en el Diario Oficial, a través del Decreto Exento N° 461, aprobado en sesión extraordinaria por el Concejo Municipal en enero de 2015. Desde esa fecha no se ha construido ninguna vivienda ni se ha aprobado ningún proyecto inmobiliario».

Ese mismo día, la municipalidad publicó un video en el que el asesor urbanista, Esteban Yuretic, señaló que «desde 2015 logramos que este sector se convirtiera en una zona libre de edificaciones de viviendas y equipamientos». Pero lo que no mencionó Yuretic es que el Plan Regulador Comunal (PRC) vigente desde 2015, si bien es cierto prohíbe la construcción de viviendas, sí permite los equipamientos. Y así lo establece el decreto exento 461.

Además, días más tarde la Municipalidad se desdijo, publicando el acta de observaciones del proyecto, con una marca en rojo que decía «rechazado». El documento indica que «el proyecto presentado resulta inviable».

Sin embargo, El Mostrador accedió a un requerimiento realizado por la Red Precordillera el 25 de febrero a través de la Ley de Transparencia, en el que se pidió informar las solicitudes de «subdivisión predial con su número de expediente en el área correspondiente al FUNDO EL PANUL y aquellas solicitudes presentadas por Inmobiliaria Gesterra y/o Vicente Navarrete». La respuesta a esta petición –que llegó el 13 de abril– es que «a la fecha existe solicitud de aprobación de división afecta a utilidad pública. El expediente es el 2-U/2021. Se encuentra revisado y con acta de observaciones. No se encuentra concluido el trámite».

Es decir, de acuerdo al documento de Transparencia, el trámite realizado por la inmobiliaria Gesterra para urbanizar el bosque Panul no estaría concluido. Al respecto, Sebastián Sepúlveda dijo a El Mostrador que «el municipio mintió al decir que el proceso estaba rechazado».

Sin embargo, la Municipalidad de La Florida aseguró a El Mostrador que «la solicitud presentada a la DOM, tal como se menciona en la respuesta de Transparencia, corresponde a una subdivisión que se encuentra afecta a utilidad pública por calles. Pero la zona del Panul se encuentra protegida por leyes del Ministerio de Agricultura que prohíben la corta de árboles nativos. Eso se observó a la empresa y por tal motivo inminentemente el proyecto está rechazado».

Una lucha de más de una década

La batalla de la Red Precordillera por conservar el bosque Panul lleva más de una década. Y es que no es la primera vez que este vital ecosistema se ve amenazado. En 2008, Gesterra presentó un primer proyecto que buscaba la construcción de más de 1.300 casas, pero finalmente no prosperó y en 2012 se rechazó definitivamente.

A partir de este hecho, el alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, inició un proceso de modificación del Plan Regulador Comunal (PRC), concretándose este cambio en el 2015. Y si bien el nuevo PRC prohíbe la construcción de casas en el sector, sí permite la subdivisión predial y el uso de suelo para la construcción de diversos equipamientos, por lo que el bosque no está completamente protegido y sobre él se cierne una seria amenaza ante el proyecto presentado por la familia Navarrete.

Para Sebastián Sepúlveda, «el problema del bosque Panul es que nunca se ha protegido. Este lugar es una propiedad privada y no tiene protección legal en estos momentos».

«El problema de fondo es que el Panul, según las autoridades, es inexpropiable porque es muy caro. Según el Estado, el Panul costaría 40 mil millones de pesos», agrega.

¿Qué se puede construir en el bosque Panul?

Lo cierto es que, si bien el cambio en el Plan Regulador Comunal de La Florida no permite la construcción de viviendas en el bosque Panul, sí está permitido realizar otro tipo de construcciones. De acuerdo al decreto 461, se permite la construcción de equipamientos, es decir, comercios, deportes, esparcimiento, áreas verdes y culto y cultura, aunque con ciertas restricciones.

En la siguiente lista queda detallado qué tipo de obras no se pueden construir. Todo aquello que esté fuera de dicha lista, se permite hacerlo en el Panul.

La molestia de Gesterra con el alcalde Carter

El 29 de marzo, el abogado de la inmobiliaria Gesterra, Patricio Pohl, envió una carta al alcalde Carter, en la que acusa a la municipalidad que este encabeza de colocar «todos los obstáculos posibles para que la propietaria del inmueble privado conocido como ‘El Panul’ pueda ejercer sus legítimos derechos sobre su terreno».

Acusaron que «de manera equivalente a como lo ha hecho en el pasado se vale de subterfugios administrativos, excede sus atribuciones, ignora e incumple la normativa aplicable y sencillamente impide el desarrollo de la comuna».

«Por más que usted insista en esta actitud, ‘El Panul’ es una propiedad privada y pretender imponerle, en los hechos y por la fuerza, el tratamiento de un parque comunal o público es un abuso de autoridad que no conduce a nada, ni los vecinos obtendrán beneficio alguno de un terreno con sus accesos completamente cerrados y con el ingreso prohibido, ni la comuna tendrá un polo de desarrollo en el sector de ‘El Panul'», agrega la declaración.

Manifiestan además que «es demasiado tiempo (años) el que hemos debido sufrir y tolerar este trato abusivo de su parte y no habiendo recibido respuesta de nuestra carta de fecha 17 de marzo pasado, Inmobiliaria Gesterra ha decidido encargar a sus abogados que recopilen todos los antecedentes, hagan la evaluación jurídica que corresponde, e inicien las acciones legales en su contra para defender nuestros legítimos derechos».

La batalla por el Panul está lejos de llegar a su fin.

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