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Miguel Littín califica al Consejo Constitucional como “una simulación de democracia” PAÍS Víctor Huenante/AgenciaUno

Miguel Littín califica al Consejo Constitucional como “una simulación de democracia”

Danilo Herrera
Por : Danilo Herrera Colaborador de El Mostrador
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En la jornada del jueves en el Consejo Constitucional continuaron las votaciones en las comisiones y, en todos los temas relevantes, se impuso el partido Republicano y Chile Vamos, mientras el oficialismo veía impávido cómo se consolida una propuesta de Constitución de derecha. Este viernes se continúan votando las enmiendas, mientras se aprueba la constitucionalización de las AFP, se reemplaza el “derecho al agua”, por el “derecho al acceso al agua”; y la incorporación de una “grave amenaza terrorista” como causal para declarar estado de sitio.


El cineasta Miguel Littín (PS), consejero por la Región de O’Higgins, efectuó una dura crítica respecto de la forma en que está funcionando el Consejo Constitucional, en el cual la derecha está consolidando en forma incontrarrestable su proyecto de carta magna, luego de que los intentos de dialogar y llegar a acuerdos quedara en nada.

En ese sentido, en una de sus intervenciones en la comisión de Derechos, acusó que “no es democrático que se repita una y otra vez la misma mecánica: nueve-cinco, nueve-cinco”, haciendo alusión a los votos que tienen ambos conglomerados en el Consejo Constitucional y en particular en su comisión: una abrumadora mayoría de las derechas, debido a la alianza entre el Partido Republicano y Chile Vamos gracias a la cual controlan 33 de los 50 votos del organismo. Es por ello que calificó al Consejo Constitucional como “una simulación de democracia”, algo que hace recordar lo ocurrido en la Convención Constituyente, donde la situación era a la inversa, pues en ella la derecha reclamaba que era constantemente ignorada por los convencionales de izquierda.

Entre las normas más destacadas que se aprobaron ayer aparecen la creación de dos nuevos capítulos: “Defensa Nacional”, sobre las Fuerzas Armadas, y “de la Seguridad Pública”, que integra a las Fuerzas de orden y seguridad pública.

En la comisión de Derechos, en tanto, se aprobaron dos normas relevantes, sólo con votos de las bancadas de derechas. La primera es la relativo al agua. En el anteproyecto elaborado por la Comisión Experta se hablaba del “derecho al agua”, indicándose que “prevalecerá su uso para el consumo humano y para el uso doméstico suficiente”, pero en lo aprobado ahora la redacción cambió y se indica que existirá “el derecho al acceso al agua” y que este tendrá como prioridad “el consumo humano y su uso doméstico de subsistencia”. En palabras de la consejera Nancy Márquez (CS): “la enmienda de la derecha limita el derecho al agua sólo al acceso”, lo que explicó la consejera Karen Araya (PC) como una disminución del estándar. Ante las críticas oficialistas, la consejera Pilar Cuevas (RN) se limitó a hacer una lectura del acuerdo de las derechas y concluir que “está recogido y mejorado el anteproyecto de los expertos en esta enmienda”. Y así fue como se aprobó con nueve votos a favor (derechas) y cinco votos en contra (oficialismo); es decir, nueve-cinco, como dijo Littín.

Las AFP

Otro de los puntos álgidos tuvo que ver con las Aseguradoras de Fondos de Pensiones, dado que la propuesta del Partido Republicano y Chile Vamos indica que “cada persona tendrá propiedad sobre sus cotizaciones previsionales para la vejez y los ahorros generados por éstas, y tendrá el derecho a elegir libremente la institución, estatal o privada, que los administra e invierta”.

Debido a ello, la consejera Karen Araya (PC) opinó que “la derecha con esta propuesta constitucionaliza a las AFP”. La consejera republicana que salió a defender la norma fue Cecilia Medina, que leyó una minuta preparada por su equipo, que decía que con esta enmienda se hacen cargo de “una de las principales preocupaciones de los chilenos”, pues “existe en nuestro país una mayoría incuestionable que está a favor de que se reconozca expresamente en la Constitución política el derecho de propiedad de los trabajadores sobre sus ahorros previsionales y la libertad de elegir quién los administrará”. La votación, de nuevo, terminó nueve-cinco.

Asimismo, se aprobó una norma constitucional que indica que “en caso alguno se podrá establecer ideas y opiniones como únicas u oficiales”. Esto fue cuestionado por Yerko Ljubetic (CS) dando como ejemplo los “informes Valech o Rettig, que han establecido la verdad de lo ocurrido en materia de Derechos Humanos en la dictadura”, lo que en función de lo aprobado podrían ser considerados como “verdades oficiales que estarían proscritas”, debido a lo anterior. Luis Silva (REP) aseveró, sin embargo, que “no está en nuestra motivación cuestionar ninguna de las cuestiones que se haya establecido en esos documentos que usted alude”.

También se aprobó incorporar una “grave amenaza terrorista” como causal para declarar estado de sitio, por lo que la comisionada experta Catalina Lagos (PS) hizo un llamado para reevaluar la norma, para que “no se utilicen herramientas de excepción frente a situaciones que son permanentes”, aclarando que en el estado de sitio se puede “arrestar a las personas en sus propias moradas”. Visiblemente afligida, luego de la aprobación de esta norma por parte de la derecha, aseguró que  “realmente no sé con qué cara voy a llegar a ver a mis hijos, luego de que se aprobó” esta norma, hecho que calificó como “gravísimo”. Por cierto, en esta votación ningún consejero de Chile Vamos o del Partido Republicano tomó la palabra para defenderla (con los votos en contra de todo el oficialismo), pero lo claro es que comienza a consolidar una nueva Constitución de las derechas.

 

 

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