El abogado Mario Zumelzu respondió a las críticas de Macarena Ripamonti. Respecto a la alusión a un aprovechamiento político, por parte de la alcaldesa, señaló que “imputar una intencionalidad política a las querellas es lo que se hace siempre cuando no hay argumentos para defenderse”.
“Que Ripamonti siga celebrando el Festival mientras Viña llora a sus muertos”, dijo Mario Zumelzu en respuesta a que la alcaldesa acusó de “impúdico e inhumano” al abogado luego de presentar una querella por cuasidelito de homicidio en su contra. La acción judicial apunta a la responsabilidad de Macarena Ripamonti en los incendios, dado que el municipio no habría contado con los planes de emergencia ni evacuación actualizados.
Ayer, la alcaldesa acusó al abogado de sacar provecho político de la tragedia: “No tiene humanidad, es completamente vergonzoso lo que está haciendo y es un daño no solo para esas familias, porque se está aprovechando de ellas, sino para el resto de las personas al acercarse de manera desvergonzada a intentar prometer, sin base jurídica, una responsabilidad para armar una polémica de corte político”.
El abogado, exdefensor de Jaime Orpis en el caso Corpesca, en conversación con El Mercurio de Valparaíso, se defendió y dijo: “Imputar una intencionalidad política a las querellas es lo que se hace siempre cuando no hay argumentos para defenderse”.
Según la información que publicó El Mostrador, desde el municipio acusan que Zumelzu ofreció asesoría gratis a la familia afectada siempre y cuando cambiaran su plan original de demandar al director del Jardín Botánico, Alejandro Peirano.
Sin embargo, Zumelzu asegura que su demanda apunta a que “acá hay una negligencia grave de Ripamonti para hacer su trabajo, no supo ser alcaldesa. Se preocupa mucho de aparecer en la prensa y lo que tiene que hacer, no lo hace”.
Otro de los abogados querellantes, Luis Castellano, también se dirigió a las críticas de la jefa comunal. El abogado aseguro que la alcaldesa “nos tiene acostumbrados a los viñamarinos a declaraciones políticas, mientras no hay una argumentación vinculada con temas técnicos o jurídicos”.
Zumelzu apuntó a que los alegatos de Ripamonti responden a una falta de solvencia jurídica: “Las imputaciones políticas vierten solamente cuando no hay argumentos de fondo”.
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