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La falta de transparencia sobre costos totales del puente Canal del Chacao

La falta de transparencia sobre costos totales del puente Canal del Chacao

Hay que recordar que el motivo principal del conflicto es quién pagará –Huyndai o el fisco de Chile– los costos adicionales que tendrá el mencionado puente, estimados, hasta ahora, en US$300 millones. Varios senadores le han pedido a la CGR que revise el contrato original y sus modificaciones posteriores, y al Gobierno que transparente los términos y costos del acuerdo en curso. También hay que recordar que los grandes beneficiados, desde el punto de vista del negocio inmobiliario, de esta megaobra son los propietarios de tierras en Chiloé, entre los cuales se encuentra el Presidente Piñera. Por último, hay que tener presente la cercanía de La Moneda con los automóviles Hyundai y la antigua relación del ministro Alfredo Moreno con los coreanos propietarios de dicha firma, que proviene de cuando el actual ministro era parte del directorio de la financiera automotriz Amicar, de los grupos Derco (de la que Moreno era vicepresidente) y Gildemeister (representante en Chile de los vehículos Hyundai).


Existe información dispersa en la prensa nacional que nos dice que habría cesado el conflicto entre la concesionaria Hyundai y el Ministerio de Obras Públicas (MOP), que tuvo en entredicho y por paralizar, durante los meses de verano, las megaobras de construcción del puente que unirá la Isla Grande de Chiloé con el continente. Es decir, que las partes se habrían puesto de acuerdo antes que “la sangre llegue al río”, estando ya anunciados, incluso, juicios en Chile y a nivel internacional (ante el centro de arbitrajes Ciadi).

Sin embargo, no hay certezas sobre el tema ni se sabe el costo final del arreglo de la controversia, ni quién pagará los sobrecostos, ni cómo, ni el papel que tuvieron los diferentes intervinientes, como, por ejemplo, el ministro Alfredo Moreno, a quien lo une un antiguo vínculo con Hyundai.

Hay que recordar que el motivo principal del conflicto es quién pagará –Huyndai o el fisco de Chile– los costos adicionales que tendrá el mencionado puente, estimados, hasta ahora, en aproximadamente US$300 millones. Costos adicionales que son consecuencia de haber concesionado esta megaobra, durante el primer Gobierno de Sebastián Piñera, bajo la modalidad “llave en mano” o “a suma alzada”, en US$700 millones, pero sin estar terminado y afinado el Proyecto de Ingeniería de Detalle del puente, y, por lo mismo, con muchos imponderables o contingencias que podían surgir o aparecer durante la etapa de construcción de la obra, cosa que efectivamente ocurrió.

Al día de hoy, varios senadores, entre ellos, Ximena Órdenes y Rabindranath Quinteros, le han pedido a la Contraloría General de la República que revise el contrato original y sus modificaciones posteriores, y han exigido al Gobierno transparentar los términos y costos del acuerdo en curso.

La relación de Alfredo Moreno y los coreanos de Hyundai no es nueva, data del 2007, cuando el actual ministro era integrante del directorio de la financiera automotriz Amicar, de los grupos Derco de la familia Del Río (de donde Moreno era vicepresidente) y Gildemeister –de la familia Lessmann–, este último representante de los vehículos Hyundai.

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