Programa convoca a intervenciones urbanas para prevenir siniestros viales entre buses y ciclistas

En una nueva jornada de sensibilización y prevención, esta vez realizada en Ñuñoa, más de 200 ciclistas se unieron este domingo a la ya tradicional fotografía masiva, que a través de una toma aérea logra ilustrar claramente los puntos ciegos de un bus del transporte público. De esta manera se grafica el riesgo que implica para un ciclista el circular en aquellos espacios no visibles para el conductor.

Esta actividad es desarrollada por Bicicultura en alianza con Buses Vule, quienes han impulsado durante 2023 el programa Compartir para Convivir, organizando hasta la fecha 9 jornadas, con la participación de más de 3.000 ciclistas, llegando además a más de 10.000 usuarios de ciclos través de información directa a sus correos y a un público aún más amplio a través de las redes sociales y medios de comunicación masiva.

Casi la mitad de los participantes de estas jornadas, son mujeres, (42%), un muy alto porcentaje, si consideramos la partición de género 70-30 que caracteriza a los usuarios de ciclos en Chile.

“Nuestra empresa opera cerca de 100 recorridos del sistema RED, con una flota de 1.440 buses, realizando más de 20 millones de viajes al mes, en 28 de las 36 comunas que cubre el sistema”, explicó Antonio Villalobos, Subgerente de Finanzas y Asuntos Públicos de Buses Vule.

“Este despliegue nos permite impactar en la experiencia y la calidad del viaje de conductores y usuarios, y tenemos la responsabilidad de realizar un aporte real en materia de información y sensibilización para avanzar hacia una mejor convivencia vial. En esa línea, y siendo la empresa con más bajos índices, decidimos impulsar este programa, que junto a varias otras iniciativas complementarias nos ha permitido alcanzar la meta de cero ciclistas fallecidos este año”, agregó.

Y es que, de acuerdo con el reciente estudio “Impacto del transporte público sobre la seguridad vial de los peatones y ciclistas”, publicado en julio de 2023, en Santiago un 26,9% de las muertes de ciclistas involucra a buses del transporte público, y el desconocimiento de puntos ciegos y dificultades de la conducción de vehículos de gran tamaño influye directamente en esta cifra de siniestralidad.

La evaluación de Bicicultura es muy positiva. La directora de la ONG y responsable del programa afirma estar contenta  “con los resultados 2023 del programa Compartir para Convivir, que creamos conscientes de que se trataba de una gesta mayor, que no debe ni puede ser impulsada por una sola empresa y organización de la sociedad civil, sino que, para producir cambios reales, profundos de nuestra cultura vial, necesita transformarse en una gesta común. Estamos optimistas y esperanzados en lograr sumar para el 2024 ojalá a todos los actores del ecosistema del tránsito”.

Aparte de la incidencia directa sobre miles de ciclistas y conductores de buses, el programa cuenta hoy con el reconocimiento y respaldo político institucional (patrocinio sin aporte financiero) de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito – Conaset, del Ministerio de Transportes a través del Directorio de Transporte Público Metropolitano – DTPM, y también del Gobierno Regional Metropolitano que colaboró en el financiamiento de uno de los encuentros masivos.

Por su parte la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, “colaboró en la etapa de investigación y procesamiento de información del conflicto y riesgos de la interacción entre buses y ciclos”, señaló Álvaro Ramis, rector de esa casa de estudios.

Víctor Hugo Romo, productor de los encuentros, explica que “también los municipios que han sido sede de encuentros, como el de Maipú, Las Condes y de Ñuñoa, han mostrado gran receptividad y compromiso. Por otro lado, numerosas empresas se han sumado aportando premios para el gran sorteo con que culmina cada encuentro, con stands de información a la feria de seguridad y convivencia vial que acompaña siempre estas jornadas, completando y volviendo más atractiva la experiencia de todos”.

Durante el desarrollo de las actividades de Compartir para Convivir, nuevos actores que comparten la necesidad de fomentar una convivencia vial más segura, se han ido sumando a la iniciativa. En esta novena jornada se sumó el Colegio Médico de Chile.

“No podemos mantenernos al margen de un problema de salud pública de la magnitud que alcanza hoy la seguridad y convivencia vial, que en nuestro país significa cerca de 2 mil personas fallecidas al año y decenas de miles de heridos, muchos de ellos con discapacidad severa y permanente por siniestros de tránsito”, afirmó Ivo Vukusich, del Departamento Medio Ambiente del Colegio Médico de Chile.

“Nos parece clave la educación vial de todos los actores del tránsito y este programa a nuestro juicio trabaja de manera muy directa y efectiva el desarrollo de una relación armónica y segura entre dos de los principales actores de la movilidad sana y sustentable, ciclistas y conductores/as de buses”, añadió.

Por su parte, la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos expresó que “muchas vecinas y vecinos se movilizan en bicicleta, por ello, para nosotros como municipio, es esencial impulsar instancias como esta, en la que distintas entidades concentran sus esfuerzos para contribuir a tener calles más seguras para todos y todas, incentivar la mejor convivencia vial, descongestionar la ciudad y aportar a la creación de una mayor conciencia medioambiental”.

En esta misma línea, la secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Tránsito, Luz Infante, destacó que el trabajo conjunto entre la sociedad civil organizada, empresas y el Estado permite avanzar en la meta nacional de reducir las muertes provocadas por siniestros de tránsito.

“Nuestro desafío está en generar cambios de conducta que permitan evitar siniestros graves y muertes en el tránsito. (…) Esta conciencia genera una mejor convivencia vial y nos acerca a los objetivos de la visión cero a la que Chile adscribe. Es este trabajo conjunto el que nos permitirá avanzar hacia esa meta”.