
Sexualidad inclusiva: qué dispositivos existen para facilitar el placer
En Chile y el mundo crecen las herramientas que promueven una sexualidad inclusiva. Juguetes sexuales adaptados, como masajeadores o sillas especiales, permiten que personas con discapacidad disfruten de una vida íntima plena y sin barreras.
La sexualidad aún está marcada por tabúes y hablar de placer desde la discapacidad parece ser un doble desafío. Por años, se les ha invisibilizado bajo prejuicios que niegan sus deseos, necesidades afectivas y vínculos sexuales. Pero hoy ese panorama está cambiando. Iniciativas locales como la silla sexual inclusiva, diseñada por una chilena para personas con movilidad reducida, han puesto el tema sobre la mesa con fuerza.
Lejos de ser una excentricidad, esta creación refleja una necesidad real. Porque el placer también es un derecho humano. Así lo han reconocido organismos internacionales, expertos en salud y organizaciones como APROFA, que en Chile lleva más de 60 años promoviendo los derechos sexuales y reproductivos desde una mirada inclusiva.
Juguetes sexuales adaptados a diferentes realidades
El Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS) elaboró en 2019 el documento “Sexualidad e inclusión de personas con discapacidad”, donde se detallan una serie de dispositivos diseñados especialmente para personas con discapacidades físicas. ¿El objetivo? Hacer que la sexualidad sea más accesible, segura y satisfactoria para todos y todas.
Aquí algunos de los más destacados:
1. Masajeadores tipo “wand”
Se trata de vibradores con un cabezal amplio al final de un mango largo. No requieren fuerza ni gran precisión para usarse, lo que los hace ideales para personas con movilidad limitada en brazos o manos. Funcionan como una extensión del cuerpo y son efectivos para estimulación externa.
2. Vibrador para la lengua
Pequeño y ajustable mediante una cinta elástica, este vibrador se coloca en la lengua y puede usarse con o sin funcionalidad en las extremidades. Es una herramienta que permite ampliar las formas de contacto íntimo de forma creativa y sensorial.
3. Arnés de muslo con dildo
Este dispositivo acolchado se sujeta al muslo y permite insertar un dildo o juguete sexual. Es útil para personas sin erección o con movilidad reducida, ya que libera las manos y facilita una experiencia sexual penetrativa sin necesidad de sostener el juguete.
4. Hot Octopuss Pulse SOLO
Se trata de un tubo semirrígido con oscilador incorporado que puede inducir eyaculación, incluso en personas con daño medular. Ha sido aclamado como uno de los juguetes más revolucionarios para hombres con discapacidad.
5. Silla sexual inclusiva
Creada por una chilena, esta silla de diseño versátil busca facilitar posiciones sexuales sin requerir fuerza o movilidad total. Ha sido pensada para personas con parálisis, lesiones medulares, esclerosis, entre otras condiciones. Ha generado debate, pero también visibilización necesaria.
Sexo y salud
Desde APROFA señalan que “este documento elaborado por SENADIS, junto con muchos otros disponibles en su web, ofrece a las personas con discapacidad distintas herramientas para vivir su sexualidad de forma segura y placentera”.
“Los juguetes sexuales son herramientas que permiten aumentar y potenciar el placer, un elemento fundamental para el bienestar de las personas” indicaron desde la organización.
Además, se recomienda siempre el uso de lubricantes para una experiencia cómoda y segura, especialmente en personas con hipersensibilidad o rigidez muscular y el uso de preservativos para prevenir infecciones de transmisión sexual o embarazos no planificados.
Otro punto clave es la educación sexual inclusiva, que no solo entregue información técnica, sino también derribe prejuicios y habilite a las personas con discapacidad a tomar decisiones informadas y libres sobre su cuerpo y su placer.
Lo que está ocurriendo en Chile es parte de un cambio más amplio. En países como España, Alemania o Canadá, ya existen asistentes sexuales capacitados para acompañar a personas con discapacidad en sus procesos de exploración íntima.
En paralelo, el mercado también ha comenzado a adaptarse. Grandes marcas como We-Vibe o Hot Octopuss ofrecen líneas inclusivas y la industria de juguetes sexuales ha empezado a considerar factores como la ergonomía, los tamaños adaptables y la facilidad de manipulación como parte del diseño.
Más que una tendencia
La sexualidad inclusiva no debería verse como algo anecdótico o alternativo. Para millones de personas con discapacidad en el mundo, poder acceder a su propio placer —ya sea en solitario o acompañado— es un acto de autonomía y salud emocional.
Para conocer el documento “Sexualidad e inclusión de personas con discapacidad” y otras herramientas útiles para promover una vida sexual plena, puedes visitar el sitio oficial del Servicio Nacional de la Discapacidad.