
Burnout en líderes: claves de autocuidado para un liderazgo sostenible
Más del 50 % de los líderes en Chile experimenta síntomas de agotamiento. En el Día del Autocuidado, expertos advierten que liderar desde el bienestar es clave para prevenir el burnout, tomar decisiones sanas y cuidar al equipo.
En el marco del Día Mundial del Autocuidado, que se conmemoró este 24 de julio, Grupo Cetep hace un llamado urgente a repensar el liderazgo desde el bienestar. Las cifras son alarmantes: un 52 % de los jefes de empresa en Chile sufre síntomas de burnout ejecutivo, y un 60 % afirma que necesita más apoyo para gestionar su estrés y salud mental. Frente a este escenario, el autocuidado ya no puede verse como un lujo: es una herramienta de liderazgo esencial.
“Muchos líderes están entrenados para contener a sus equipos, resolver crisis y cumplir objetivos. Pero pocas veces se les enseña a sostenerse a sí mismos”, explica la psicóloga de Grupo Cetep, Alejandra Rojas. “Un liderazgo saludable comienza cuando el líder reconoce que su bienestar no es negociable. Es desde ahí donde puede tomar mejores decisiones, conectar genuinamente con su equipo y prevenir el desgaste”.
Tradicionalmente, el liderazgo ha sido sinónimo de fortaleza incansable, respuestas inmediatas y presión constante. Pero esa imagen se ha vuelto insostenible. Hoy, expertos proponen una mirada distinta: el liderazgo efectivo y sostenible empieza por el autocuidado.
Recomendaciones de autocuidado
Frente a esto, Grupo Cetep propone cinco prácticas concretas de autocuidado para líderes que buscan sostener su rol sin sacrificar su salud mental:
● Agenda pausas, no solo reuniones: Muchos líderes llenan su agenda con compromisos externos, pero olvidan reservar espacios para recargarse. Pequeñas pausas de cinco o diez minutos entre reuniones permiten regular la respiración, ordenar ideas y recuperar foco. Estos microdescansos previenen la fatiga acumulada y favorecen una toma de decisiones más consciente.
● Establece límites digitales saludables: Responder correos a medianoche o mantenerse conectado todo el fin de semana refuerza una cultura de agotamiento. Definir horarios claros para la desconexión digital, tanto para uno mismo como para el equipo, ayuda a marcar un ejemplo y proteger el tiempo personal, fundamental para la recuperación emocional y mental.
● Incorpora prácticas restaurativas: El autocuidado no siempre requiere grandes gestos. Caminar por el parque, escuchar música, practicar deporte, cocinar o simplemente meditar son actividades que reducen el cortisol (hormona del estrés) y mejoran la disposición anímica. Incluir al menos una actividad restaurativa diaria permite mantener el equilibrio y la energía.
● Busca redes de apoyo entre pares: Liderar puede ser una experiencia solitaria. Contar con espacios de confianza para compartir dudas, emociones o estrategias con otros líderes permite alivianar la carga emocional. La mentoría, los grupos de apoyo o los círculos de conversación entre pares son herramientas potentes para sostenerse mutuamente.
● Evalúa tu bienestar de forma consciente: Hacer un “chequeo” mental regular puede marcar la diferencia. Preguntas como: ¿Estoy durmiendo bien? ¿Me siento irritado con facilidad? ¿He perdido el entusiasmo por lo que hago? Ayudan a detectar señales tempranas de desgaste y permiten tomar acciones preventivas, como delegar tareas o buscar apoyo profesional.
Autocuidarse es liderar con conciencia
El liderazgo moderno exige más que resultados: requiere salud, presencia y empatía. Reconocer los límites, priorizar el bienestar y practicar el autocuidado no debilita el rol del líder, sino que lo fortalece. Como concluye la psicóloga Alejandra Rojas de Grupo Cetep: “En el Día del Autocuidado, invitamos a repensar el liderazgo desde el cuidado personal. No se trata de ser menos productivo, sino de liderar desde la salud, la empatía y la conciencia. Cuando el líder se cuida, todo el equipo se fortalece”.