Hasta los más pesimistas consideran que el contagio de la crisis chipriota está contenido
El euro se depreciará no sólo debido a Chipre, según Morgan Stanley, que se autodenomina bajista a largo plazo en relación con la moneda común de Europa.
Si bien el euro cayó ayer 0,9 por ciento, a US$1,2957, en las operaciones de Nueva York conforme una propuesta de gravar los depósitos en Chipre amenazaba con afectar al sistema bancario de Europa, de todos modos cerró más alto que el punto intradía más bajo de la semana pasada, que fue de US$1,2911. Estrategas de Morgan Stanley, que estiman que la moneda del bloque de 17 países caerá a US$1,17 con el tiempo, dijeron que ven perspectivas de una recuperación y que toda declinación a corto plazo probablemente se limite a US$1,27.
El compromiso que anunció en julio el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, de hacer lo que haga falta para preservar la unión monetaria aún resuena en los mercados financieros, lo cual apuntala el euro y los mercados de renta fija de la región. Draghi dijo este mes que su programa de compra de bonos –al que aún no se ha recurrido-, conocido como Transacciones Monetarias Directas, OMT por la sigla en inglés, sigue siendo una protección “efectiva”.
“Los efectos de contagio son relativamente limitados”, dijo Ian Stannard, jefe de estrategia cambiaria europea de Morgan Stanley en Londres, uno de los 10 pronosticadores más exactos de paridades cambiarias de Europa, Medio Oriente y África, según datos que recopiló Bloomberg. “Hay fuerzas globales más grandes que guían los mercados cambiarios”.
El lento ritmo del crecimiento global hace que los grandes bancos centrales del mundo extiendan a una tercera ronda sus cinco años de flexibilización monetaria luego de superar la recesión y la crisis financiera. El BCE mantuvo las tasas de interés sin cambios en un bajo nivel récord de 0,75 por ciento cuando las autoridades de la entidad se reunieron el 7 de marzo, y Draghi destacó en conferencia de prensa que algunos funcionarios analizaron reducir los costos crediticios.
‘Disminución sustancial’ del riesgo
“La liquidez global apuntalará el riesgo en líneas generales, lo cual es probable que limite las posibilidades negativas para el euro”, dijo Stannard.
Luego de una liquidación inicial, muchos mercados financieros recuperaron parte de sus pérdidas en operaciones posteriores conforme las autoridades europeas dieron indicios de flexibilidad en la aplicación del impuesto bancario sin precedentes en Chipre en un intento de calmar la indignación que amenaza con frustrar el rescate del país. Los rendimientos de los bonos gubernamentales italianos a 10 años aumentaron menos de cuatro puntos básicos, o 0,04 puntos porcentuales, a 4,63 por ciento, y se mantuvieron por debajo del nivel más alto del pasado: 4,96 por ciento el 27 de febrero.
“Se reconoce que los riesgos han experimentado una disminución sustancial”, dijo en entrevista telefónica Moira McLachlan, una administradora de dinero en Fort Lauderdale, Florida, de Hansberger Global Investors, que gestiona US$6.300 millones. Si no se consigue brindar garantías a los depositantes en Chipre, “es posible que todas las apuestas desaparezcan”, dijo McLachlan.
Las escenas de chipriotas haciendo fila ante los cajeros automáticos hicieron surgir el fantasma de la huída de capitales y amenazaron con interrumpir la calma que se instaló en el mercado respecto del bloque monetario desde que el BCE prometiera en septiembre respaldar la deuda de los países en problemas. Las condiciones del rescate de Chipre son negativas para los depositantes de Europa y podrían afectar las calificaciones de los bancos de la región, dijo hoy Moody’s Investors Service en un informe de Perspectivas Crediticias.