En Chile las políticas estatales son claramente insuficientes para trabajar en derechos sexuales y reproductivos como derechos humanos fundamentales, y por eso el trabajo de las organizaciones de la sociedad civil es fundamental en áreas como la atención en salud sexual con enfoque de género y derechos, educación integral de la sexualidad, precios justos de productos relacionados a la salud sexual y reproductiva y el constante trabajo de vínculo con la comunidad.
“Sabemos que en Chile las políticas estatales aún son insuficientes para posicionar los derechos sexuales y reproductivos como un eje central de la vida de las personas, entonces ¿qué haces tú para cambiar las cosas?”. Esta es la pregunta que plantea la campaña #Yomepongo, de la Asociación Chilena de Protección a la Familia (Aprofa), una corporación de interés público, sin fines de lucro, dedicada a brindar servicios de atención, capacitación, y promover iniciativas, leyes y políticas en materias de salud y educación sexual y reproductivas.
El último informe de ONUSida posiciona aChile como el país de Sudamérica con mayor tasa de nuevos casos de detección de VIH, pasando de 67 mil casos en 2017 a 71.000 en 2018. “Esto evidencia que en Chile las políticas estatales son claramente insuficientes para trabajar en derechos sexuales y reproductivos como derechos humanos fundamentales, por lo que el trabajo de la sociedad civil organizada es urgente para acercar los derechos a la población”, advierte la directora de Aprofa, Débora Solís.
De ahí la necesidad de fortalecer la existencia de organizaciones de estas características, como Aprofa, que necesitan del apoyo constante de la comunidad para continuar su trabajo y expandirse a todo el territorio para que todas las personas puedan vivir su sexualidad sin discriminaciones de ningún tipo, como un ejercicio de derechos humanos fundamentales.
Por esto, Aprofa está desarrollando la campaña #YoMePongo con el fin de recaudar fondos para seguir llevando a cabo diversas acciones que posibiliten continuar con su trabajo en ejes tan relevantes como la atención en salud sexual con enfoque de género y derechos, educación integral de la sexualidad, precios justos de productos relacionadas a la salud sexual y reproductiva y el constante trabajo de vínculo con la comunidad.
“Debido a las condiciones en las que se encuentra nuestro país, nos vimos en la obligación de salir a buscar recursos que nos ayuden a sustentarnos económicamente y seguir trabajando, para que todas las personas podamos vivir nuestra sexualidad plenamente sin discriminaciones de ningún tipo. Por la misma razón es trascendental que nuestro trabajo continúe y para ello necesitamos de tu aporte monetario”, señala Débora Solís.
La campaña #Yomepongo recibe donaciones desde los 3 mil pesos a través de diversos canales. Para más información, visita la web de Aprofa.