BRAGA
Créditos: Cami Na
Los espacios públicos suelen ser un lienzo para los artistas visuales, sin embargo no siempre son lugares seguros para las mujeres pintoras. Por ello, un grupo de mujeres artistas callejeras crearon ambientes propios para generar lugares seguros, comunitarios entre ellas mismas.
“Pintoras Callejeras” es el nombre que se les dio para expresar el arte del muralismo realizado por mujeres, proyecto autoconvocado que nace en 2014 como herramienta de resistencia y autonomía. “Poder practicar la disciplina del grafiti y el muralismo callejero, tomándose espacios públicos en un ambiente de sororidad y libre expresión, donde pueden establecer discursos colectivos de resistencia”, indicaron.
La iniciativa de “Pintoras Callejeras” la encabeza la pintora y tatuadora santiaguina de 36 años, Camila Blanche, conocida como Cami Na, quien ha realizado dos encuentros en todo el país para mostrar las artes de las mujeres, un espacio que logró marcar tendencia por ser el primer encuentro de mujeres autogestionado sin una institucionalidad detrás.
“Surgió entonces la idea de generar un lugar en común, primero en el espacio virtual para conocernos y encontrarnos desde nuestros intereses y saberes; para posterior facilitar el primer encuentro presencial, en noviembre de 2014. Este primer encuentro se armó en base a pura colaboración y apañe, pintaron aproximadamente 50 mujeres de distintos lugares de Chile que se hicieron parte de un proyecto que era 99% ganas y amor, y 1% recursos”, comentó Blanche.
Además el encuentro es performático y cuenta con un aporte con enfoque de género y sororidad por parte de las mujeres que integran el encuentro. Para Camila, el espacio busca una construcción comunitaria y colectiva donde emergen redes entre las mujeres que expresan su arte en los muros. “Somos parte entonces de una filosofía de construir comunidad entre mujeres y en la calle, lo que se ha manifestado en los últimos años con la aparición de otras colectivas y organizaciones que buscan los mismos objetivos: visibilizar la pintura callejera femenina, generar redes desde la trinchera del arte y tomarse un espacio en que han primado históricamente las masculinidades”, sentenció la artista.
El colectivo ya ha realizado dos encuentros nacionales, esperando la oportunidad de lanzar una tercera versión. Actualmente trabajan con la productora cultural Trenzar junto a la gestoras culturales Francisca Jara y Jennifer Díaz.
“Estamos reactivando nuestras redes y buscando financiamiento para realizar el encuentro durante el segundo semestre del próximo año. Creemos que es momento de que Pintoras Callejeras tenga la talla de los encuentros de pintura que nos merecemos en un país que está en claro proceso de cambio, por primera vez contaremos con invitadas internacionales latinoamericanas.”, comentó Blanche.
Por último, la artista de del colectivo de mujeres, considera este espacio como un tejido desde una red de mujeres territoriales “preservando la esencia comunitaria y feminista que nos caracteriza”. “Sentí que Pintoras Callejeras superó totalmente las expectativas, porque trasciende al concepto de encuentro y logra concebir un espacio seguro, de resguardo y contención, además del componente artístico en un ambiente de absoluta sororidad, libre expresión, resistencia y emancipación tanto individual como colectiva”, finalizó.
Mural de Cami Na en Museo de Cielo Abierto de San Miguel
