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Inclusión en tiempos difíciles: sostener el cambio en contextos políticos adversos Yo opino Créditos: El Mostrador.

Inclusión en tiempos difíciles: sostener el cambio en contextos políticos adversos

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Macarena Gonzalez Cuevas
Por : Macarena Gonzalez Cuevas Líder de Diversidad, Equidad e Inclusión en Metro de Santiago / Integrante de La Diversidad Se Comparte.
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En momentos de incertidumbre política y social, la inclusión corre el riesgo de ser relegada a un segundo plano. Sin embargo, es precisamente en estos contextos donde las organizaciones tienen la oportunidad —y también la responsabilidad— de abandonar prácticas performativas y avanzar hacia una cultura verdaderamente inclusiva. La inclusión no es un gesto simbólico ni una estrategia de comunicación: es una práctica política.

Quienes trabajamos en Diversidad, Equidad e Inclusión ejercemos un liderazgo transformador, promoviendo cambios estructurales que desafían el status quo y amplían los márgenes de participación, representación y justicia social. Esta labor, profundamente ética, implica tomar decisiones que afectan vidas, redistribuyen poder y construyen comunidad.

En el caso de las empresas del Estado, el riesgo de retroceder en estrategias de sostenibilidad social ante cambios de gobierno es particularmente alto. La discontinuidad de políticas públicas puede debilitar avances en desarrollo social, especialmente cuando se desarticulan programas que promueven la equidad, la participación ciudadana y el respeto a los derechos humanos. Para contrarrestar este riesgo, es fundamental sostener el cambio desde una estrategia que combine evidencia, empatía y liderazgo.

La información basada en datos confiables permite blindar las decisiones frente a discursos ideológicos o simplificaciones políticas. La empatía institucional, por su parte, es la que posibilita que las organizaciones reconozcan las experiencias diversas de sus equipos y comunidades, generando vínculos reales con su entorno. Finalmente, el liderazgo con propósito es indispensable en tiempos difíciles: no basta con ocupar un cargo, se requiere convicción, coherencia y valentía para sostener el cambio incluso cuando el contexto lo desafía.

La inclusión no puede depender del clima político. Debe ser parte del ADN institucional, transversal a todas las áreas y sostenida por una gobernanza que entienda que el desarrollo social es inseparable de la justicia, la equidad y la participación. Solo así será posible construir organizaciones resilientes que no retrocedan ante la adversidad y que, en cambio, sean capaces de sostener el cambio en beneficio de toda la sociedad.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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