Recomencemos. Qatar está a la vuelta de la esquina

“¡Y déjame gritarte!/Quiero desahogarme/Yo sin tu amor vivir no puedo/Yo no me puedo quedar/Sentado a tu lado/Sin arte ni parte/pero no soy capaz/de ponerme a mirar/esos ojos de braza/sin luego sentir estremecimiento/y corro a tu encuentro diciendo te quiero/Recomencemos…”  Estas frases forman parte de un pedazo de canción de Adriano Pappalardo, que en 1980 causaron furor y éxito para hablar de una reconciliación.

Y cito este tema porque en Alicante debiese cerrarse uno de los temas más odiosos que envuelven a la Roja desde el 17 de Octubre de 2017. El día que se consumó la eliminación a Rusia 2018 y donde explotó la bomba entre algunos referentes de la selección (la historia es archi conocida)

Han pasado casi dos años y esta herida aún sangra en todos. Errores de todas las partes y sin tal vez un mediador que lograra antes colocar los puntos necesarios para cortar la hemorragia de egos y disparos.

Y más allá d ellos títulos o nombres que se puedan colocar para sellar este pacto de no más agresión, la ciudad de la comunidad valenciana será el lugar preciso para aunar criterios e intereses generales, tomando en cuenta que el camino a Qatar 2022 está a la vuelta de la esquina. Y de verdad, está clasificatoria estará más dura y competitiva que nunca.

Llegó el momento para que Bravo y Vidal, se encierren en una pieza y hablen todo, sin tapujos ni diplomacias, se digan todo lo que se deben decir y terminar esta triste historia. Ellos, son piezas claves de un equipo que aún tiene cosas que escribir en el concierto sudamericano y mundial. Sus compañeros necesitan que estos dos trenes no vuelvan a chocar, ya que muchos se sienten complicados (como en cualquier conflicto) de tener que tomar partido por uno u otro bando.

Es una oportunidad única para que Rueda pueda contar con lo mejor que tiene Chile. Y se necesitan a todos, porque la ruta para alcanzar cupos es larga y los rendimientos van variando de acuerdo a las temporadas. Por eso es clave, sacar la espoleta de esta bomba y dejarla desactivada; porque de volver a explotar, siento que veremos otro mundial por la pantalla chica.

Aún la gran base de la “generación dorada” tiene algo que decir. Son jugadores respetados y que compiten en buen nivel. Por ahora hay señales positivas y alentadoras en cuanto a poder armar un equipo competitivo, lo que requiere Rueda con urgencia es ampliar el plantel.

Pensando en el debut de Marzo, Chile no contará con tres jugadores (Medel, Jara y Lichnovsky) quienes están suspendidos, por lo cual la dupla de Paulo Díaz y Guillermo Maripán debería ser la que abra los fuegos. La banda derecha es de Isla y donde aún siento que no se consolida alguien es por el lateral izquierdo, donde por ahora Parot va sacando ventaja al resto de los que ha probado el colombiano. El arco es de Claudio Bravo sin cuestionamientos, aunque siempre será mejor que el meta tenga más ritmo de competencia.

La zona de volantes tiene tres nombres seguros e inamovibles: Pulgar, Aránguiz y Vidal. Ese mediocampo se consolidó en Copa América como uno de los mejores del torneo y claramente son fijos en la oncena estelar.

Para el ataque hay dos calados, por algo son el goleador histórico y el segundo con más anotaciones en la Roja, vale decir Alexis Sánchez y Eduardo Vargas. El extremo o puntero derecho según mi opinión debe ser por rendimiento y momento José Pedro Fuenzalida; aunque hay tres jugadores del medio nacional que vienen pidiendo cancha y camiseta. Si mantienen sus actuaciones; Edson Puch, César Pinares y Marco Bolados deben estar entre los considerados, y son alternativas válidas para los partidos.

Hay que ser conscientes en cuanto al potencial y capacidad que tienen Brasil, Argentina y Uruguay; tres que deberían ser fijos en los cupos a Qatar. Después viene la línea de Colombia, Perú y Chile. Un peldaño más atrás están Ecuador, Paraguay y Venezuela. Claramente y sin menospreciar, Bolivia no asoma como una escuadra que vaya a estar en la discusión.

Por lo tanto la radiografía del momento a cinco meses de iniciar esa loca carrera para capturar los boletos a una nueva justa mundialista será dura y estresante. El rótulo del bicampeonato quedó atrás y en la galería del hermoso recuerdo. Hoy el presente es partir casi de cero, pero con una ventaja de tener aún una base de esos títulos y algunos nombres emergentes que van respondiendo a la expectativa.

Por ello, vuelvo a colocar ese añoso tema de Pappalardo, para creer que se puede, más allá de todos los problemas e inconvenientes que se deben superar…

Recomencemos (la la la la)

Recomencemos (la la la la)

Recomencemos (la la la la)